taoufik amencor solicitó asilo cansado de ser perseguido por su aspecto

Músico a este lado de la frontera

Amante de la música, inseparable de su guitarra, Taoufik Amencor, un joven tetuaní de 19 años, huyó de su país ante la persecución a la que era sometido por su aspecto. “La gente en Marruecos cree que eres gay por llevar pendiente, lucir tatuajes, pintarte el pelo”, explica.

Taoufik confiesa que preferiría perder sus pies a verse separado de su guitarra. Este joven tetuaní de 19 años llegó a Ceuta hace un año cansado de la persecución y la violencia a la que era sometido en su propio país a causa de su aspecto físico.

“La gente en Marruecos cree que eres gay por llevar pendiente, lucir tatuajes, pintarte el pelo”, explica con una sonrisa antes de recordar el día aciago en el que decidió que debía huir de su país y solicitar asilo en España. Taoufik fue asaltado por unos jóvenes que le infligieron dos heridas de arma blanca, una agresión que trató de denunciar ante la Policía. Un agente le vino a decir que por su aspecto se merecería que lo hubiesen matado: “Sentí como un pincho dentro: al día siguiente le dije a mi madre que no podía aguantar más”, explica el joven, que lamenta no haber recibido todavía información alguna sobre la marcha de su solicitud de asilo.

Taoufik resolvió cruzar la frontera y aquí, en Ceuta, sobrevivió una temporada en las calles con la única compañía de su guitarra. Dos meses más tarde, y tras formalizar su petición de asilo, se convirtió en uno de los residentes del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI). Su sueño, ahora, es poder desarrollar su talento como músico.

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