La afición de su hijo a los videojuegos ha costado a una madre ceutí 5.200 euros. La mujer había acudido a la Policía Nacional después de descubrir que se habían endosado cargos a su tarjeta de crédito en concepto de 63 operaciones que no había autorizado.
Las pesquisas policiales permitieron determinar que el gasto había sido causado por su propio hijo, quien había activado servicios de pago en la red para poder jugar a la videoconsola. El muchacho, que había adquirido monedas virtuales para participar en una aplicación de multijuego online, dedicaba entre cuatro y cinco horas diarias a los juegos en red.