La tramitación del expediente abierto por la Ciudad a los policías locales de la Unidad de Intervención Rápida (UIR) por su actuación el pasado sábado contra aficionadas de la selección de fútbol marroquí ha quedado suspendida. La decisión se adopta para no interferir en el procedimiento judicial que investiga si los agentes incurrieron o no en algún tipo de responsabilidad penal cuando golpearon en la vía pública a estas mujeres.
El portavoz del Gobierno, Alberto Gaitán, ha explicado que los agentes involucrados en el incidente reciben asistencia legal de la Ciudad tal y como establece la normativa que regula las condiciones de trabajo y funcionamiento de la Policía Local.
Gaitán ha subrayado que, a pesar de la repercusión que ha adquirido el suceso, las celebraciones deportivas de los resultados de los partidos del Mundial de fútbol se han sucedido en Ceuta sin incidentes «al igual que ha ocurrido en el resto de España».
El portavoz se ha remitido a la decisión que finalmente adopte la Justicia para evitar manifestarse sobre lo sucedido. «Este Gobierno tiene un compromiso irrenunciable con los derechos y libertades de los ciudadanos y apoya a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, que hacen una labor esencial y fundamental para garantizar la libertad de los ciudadanos», ha defendido Gaitán
Según el testimonio de testigos del incidente registrado el pasado sábado, una unidad de la UIR intervino ante un grupo de aficionados que se encontraban en el Paseo del Revellín celebrando la victoria de Marruecos ante Portugal en el Mundial. Los agentes apartaron del grupo a un chico con un tambor, a quien condujeron a un furgón policial estacionado frente a la Plaza de la Constitución. Hacia allí se dirigieron cuatro mujeres, dos de ellas parece ser que menores de edad, que increparon a la Policía por interrumpir la celebración cuando esta se desarrollaba pacíficamente. El enfrentamiento verbal acabó con los policías haciendo uso de sus defensas reglamentarias para golpear a las mujeres.
