Los aficionados al Carnaval ya no están para colas. La puesta a la venta en las taquillas del Teatro Revellín de las entradas para el concurso, que se celebrará el próximo 10 de febrero, no ha concitado concentraciones de público como las que resultaban usuales en años anteriores.
La mayoría de las localidades han sido adquiridas a través de Internet, lo que no ha impedido que un grupo de fieles haya seguido optando por acercarse a las taquillas. A las 10.30 de la mañana no llegaban a cuarenta las entradas que se habían adquirido presencialmente.