CSIF reclama al Gobierno municipal que el Centro de Internamiento de Menores Infractores (CIMI) Punta Blanca y de la Unidad de Medio Abierto pasen a tener la consideración de servicios especiales dentro del Área de Menores. En un comunicado, el sindicato insiste en que no puede darse el mismo trato a estos trabajadores que a los que están adscritos a instituciones que atienden a menores de otras tipologías. “No puede ponerse en el mismo escalón a quienes atienden a menores en situación de desprotección y quienes atienden a asesinos y violadores”, argumentan los sindicalistas. Estas unidades atienden, supervisan y ejecutan las medidas judiciales impuestas a jóvenes por la comisión de distintos delitos.
Para avalar su discurso, CSIF arguye que nunca ningún trabajador del ámbito de la protección de menores ha mostrado interés por reclamar destino en Punta Blanca o la Unidad de Medio Abierto. “Jamás se ha producido una incorporación de ningún trabajador al CIMI Punta Blanca, mientras que sí han tenido lugar traslados de personal a otros centros por razones de índole personal o cuestiones médicas”, explica el sindicato.
El CIMI y la de Medio Abierto son las únicas unidades que están supervisadas y fiscalizadas tanto por el Juzgado de Menores como por la Fiscalía, así como por otras entidades e instituciones oficiales como el Defensor del Pueblo. En estos centros, además de cumplir con toda la normativa existente en materia de Protección de Menores también se ha de observar la legislación reguladora de la Responsabilidad Penal del Menor, algo que no ocurre en el resto de unidades del Área de Menores.
