La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, ha concluido su primera visita oficial a Ceuta sin hacer una sola declaración pública. La agenda de Gámez no ha incluido ningún encuentro con los medios de comunicación, a los que solo se ha convocado para tomar imágenes.
Gámez ha aterrizado a las nueve de la mañana en el helipuerto ceutí a bordo de una aeronave de la Guardia Civil. La directora general ha sido recibida por la delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, y por el jefe de la Comandancia de la Guardia Civil, Gabriel Domínguez.
La directora general, que tenía como acto central de sus actividades una reunión con mandos del Instituto Armado en la sede de la Comandancia, ha visitado las instalaciones del Servicio Marítimo Provincial en el puerto, la Compañía Fiscal y ha recorrido el perímetro fronterizo visitando los puestos de El Tarajal y de Benzú. Gámez también se ha entrevistado con agentes que han permanecido hospitalizados a causa del covid-19 y con los que había mantenido contacto.
Antes de su reunión con los mandos policiales, Gámez se ha desplazado al Palacio de la Asamblea para reunirse con el presidente de la Ciudad, Juan Vivas. La directora general ha valorado este encuentro institucional como un modo de “estrechar los lazos históricos que Ceuta y Guardia Civil han mantenido y mantendrán para siempre”. En la misma línea, Vivas ha destacado el “ejemplo de abnegación, entrega, vocación de servicio, sentido del deber y polivalencia” del Instituto Armado.
En el encuentro también han participado la delegada del Gobierno, la vicepresidente primera de la Ciudad, Mabel Deu, el coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil y el comandante segundo jefe de Secretaría de Despacho, José Francisco Cutillas.
La Dirección General de la Guardia Civil remitía a los medios a media tarde un escueto comunicado que no incluía ninguna declaración de Gámez.
