Uno de los aspectos más controvertidos del proyecto de la Gran Vía es el de la pérdida de plazas de aparcamiento que comporta su ejecución. El arquitecto Ángel Moreno ha explicado que, por ejemplo, en la calle Jaúdenes “se perderán todos los existentes”, aunque ha señalado que “han sido los comerciantes de la mencionada calle los que lo han solicitado” y la Ciudad lo único que ha hecho ha sido atender sus peticiones. “Pidieron que se quitaran los aparcamientos y que se ensancharan las aceras y se ganara espacio para el peatón”, como así refleja el proyecto de remodelación.
Idéntica circunstancia sucede con la Plaza de África, que también pierde la mayoría de los aparcamientos existentes en estos momentos, “ya que la intención es peatonalizar todo ese espacio histórico de la ciudad”.
El arquitecto se ha quejado de la información que se ha estado divulgando sobre el proyecto “ha sido tergiversada, sobre todo porque se han hecho públicas algunas informaciones cuando todavía no tenía elementos diseñados”. “He visto información publicada que me ha sorprendido”, se ha quejado.
