La Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz ha desestimado la recusación de la magistrada del Juzgado de Instrucción número 3 de Ceuta, Raquel Lucini, presentada por el abogado de Antonio López sosteniendo que la imparcialidad de la juez se veía comprometida debido a una presunta autoatribución de la causa y a relaciones personales de Lucini con un funcionario policial. El auto es claro en ese sentido: "no existe otra alternativa que la inadmisión a trámite de dicha recusación".
Asimismo añade que la relación personal de la magistrada era perfectamente conocida por las partes recusante y adherente, ya que como la propia promotora del incidente reconoce en su escrito y confirma en su informe la propia magistrada recusada, "era pública la relación de hecho asimilable al vínculo matrimonial que la misma venía manteniendo".
Tras este auto, Lucini seguirá al frente del caso más mediático que ha vivido la ciudad y en el que se han visto implicados miembros del Gobierno del PP, así como de la oposición, demostrando una red de favores hasta entonces desconocida en relación a la compra venta de viviendas de protección y que tenía como cabeza visible al que fuera gerente de la empresa municipal de la vivienda, Antonio López, actualmente en prisión.
