Broche de oro para el 600 aniversario de la llegada de Nuestra Señora de África a la ciudad

La procesión Magna Mariana llena de fe las calles del centro de la ciudad

Paso de palio con la imagen de María Santísima de las Lágrimas (C.A.)

Ceuta ha vivido este sábado una jornada histórica con la celebración de la procesión Magna Mariana, que ha puesto el broche de oro a las celebraciones del 600 aniversario de la llegada a la ciudad de la imagen de Nuestra Señora de África, patrona y alcaldesa perpetua.  

La Diócesis de Ceuta celebra este curso cofrade 2017-2018 el año jubilar con motivo de los 600 años de su creación y de la llegada a la ciudad de la imagen de Santa María de África Coronada, Madre y Patrona de los caballas.

Los actos programados para este sábado comenzaron con los pasacalles, que corrieron a cargo de la banda de guerra de La Legín, la banda de música de la Amargura y la de la Encrucijada. Las tres agrupaciones llenaron de música las calles del centro,. Desdee la Plaza de África hasta la Plaza de los Reyes estuvieron desfilando los legionarios, que, como siempre, reunió a una gran cantidad de público para presenciar su paso. Desdela Marina lo hizo la banda de música de la Amargura, que concluyó su recorrido en Los Remedios, mientras que la de la Encrucijada partió de la zona del Revellí para discurrir por Camones, Plaza de los Reyes, Remedios y vuelta al punto de inicio. Era, sin duda, el preámbulo de una tarde histórica, en la que las calles de Ceuta se iban a llenar de fe ante el desfile de las trece imágenes marianas que participaron en la procesión Magna y con la imagen de la patrona de la ciudad en el altar habilitado al efecto en la Plaza de la Constitución.

Los ceutíes, devotos de sus imágenes marianas, se apresuraron a ocupar las sillas habilitadas por el recorrido. Bajo un sol de justicia, cientos de personas se daban cita en los alredores del santuario de Nuestra Señora de África para presenciar la salida de su "Madre".

Minutos antes de la siete de la tarde, el presidente de la Ciudad estrechaba la mano al obispo de la  Diócesis de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza, ante la atenta mirada del vicario general, José María Mateos, en la puerta trasera del santuario.

A las siete de la tarde, cientos de personas aguardaban a las puertas de la iglesia para ver la salida del paso de Nuestra Señora de África, que iba acompañada en esta ocasión tan especial por banda de música sevillana del Maestro Tejera. El cortejo avanzó por el Paseo de las Palmeras hasta llegar a la Plaza de la Constitución, donde el paso quedó instalado en un altar levantado al efecto. El sol radiante hacía que la imagen, y sobre todo la corona, luciese preciosa.

Las autoridades se ubicaron en un palco anexo, y mientras en el cruce de la calle Jaúdenes con Victori Goñalons asomaba la carreta que portaba el Simpecado de la Hermandad del Rocío. Acompañado por la banda de piteros de La Línea de la Concepción, la carreta se acercaba hasta la Plaza dela Constitución para rendir pleitesía a la patrona, al igual que hicieron el rersto de las doce imágenes marianas restantes que conformaban el cortejo de la Magna.

Tras la Hermand del Rocío llegaban María Santísima de las Lágrias, Nuestra Señora de las Penas, María Santísima de los Dolores, Virgen Santísima de la Amargura, María Santísima de la Caridad, María Santísima del Amor, Sacratísima Virgen de la Esperanza, Nuestra Señora del Desemparo, Madre de Dios de la Plama, Nuestra Señora de la Soledad, Nuestra Señora del Mayor Dolor y Nuestra Señora de los Remedios.

Todos los pasos discurrieron por Jaúdenes, Victori Gonalóns y Plaza de la Constitución. Tras saludar a la imagen de Nuestra Señora de África, las imágenes marianas del Campo Exterior han salido por el Paseo de las Palmeras, mientras que las de las hermandades del centro han tomado la calle Real para dirigirse a sus templos.

Más de tres horas ha durado el recorrido de las imágenes desde la catedral hasta la Plaza de la Constitución. La Ceuta cofrade ha puesto este sábado en la calle, con la procesión Magna, el rico patrimonio que posee, en una tarde de verano que hizo que fuera mucho el público que se diera cita en las calles para presenciar este momento histórico que a buen seguro ha quedado grabado en las mentes y los corazones de todos los ceutíes.