No está el momento para realizar gastos innecesarios, pero esto no parece entenderlo el gerente de la sociedad municipal de Obimace, Gregorio García Castañeda, ni el consejero responsable, Yamal Dris.
La empresa compró en un año 8 baterías para tres de sus vehículos que por la descripción de sus matriculas son relativamente nuevos. El gasto fue de casi 400 euros. La previsión de este suministro es desorbitada sobre todo teniendo en cuenta que las baterías tiene una duración de varios años y los vehículos a los que van destinadas no tendrán más de cinco años.
Del mismo modo, no se justifica la compra de ocho baterías en un año porque los acumuladores eléctricos tienen como mínimo un año de garantía y hasta dos en alguno casos. Un ejemplo de gasto superfluo en tiempos de crisis que no tiene justificación.
Asimismo, la sociedad adquirió otras tres baterías, y ya suman 11 en un año, para un sólo vehículo, un Nissan, que supone casi otros 300 euros.
La sociedad, además, multiplicó por tres la compra de filtros, pastillas de frenos, correas de alternador y litros de aceite, todo para un año y un vehículo. Los embragues deben ser cosa fina porque compraron tres conjuntos al precio de alrededor de 1.000 euros.
Por otra parte, sorprende que en el último informe de gestión del año 2020, Obimace revele que tenía cero existencias como puede ser en material de obra. Extraño como poco para una empresa cuyo objeto social es, entre otros, el mantenimiento, adecentamiento de espacios y zonas de la ciudad, por degradación medioambiental, emergencia o especial tratamiento. Esto choca bastante con la presencia de diverso material en el almacén que tiene en la carretera de Loma Margarita.
Esto hace de Obimace que sea una de las sociedades que menos practica la transparencia entre las que dependen de la Ciudad Autónoma de Ceuta.
Consejos de Administración
En lo que llevamos de 2021 Yamal Dris, consejero de Medio Ambiente y Servicios Urbanos, no ha convocado un sólo consejo de administración de una sociedad que maneja 11 millones de euros. Según los estatutos, ha de celebrarse al menos uno al mes. El último fue un consejo extraordinario en el mes de diciembre de 2020, solicitado tres meses antes, en septiembre, por los grupos de la oposición, para conocer detalles sobre algunos contratos
