estudio de la fundación educo

"Los problemas de la infancia estaban ocultos para la sociedad hasta que llegó Digmun"

Digmun ha dado a conocer las conclusiones del estudio "Pequeñas voces, grandes sueños", elaborado por las asociaciones que conforman la red Educo.

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photo_camera El acto se ha celebrado en el salón de actos del Campus / ANTONIO SEMPERE

Las voces de la infancia reclaman protección. Bajo este lema la asociación Digmun ha presentado el trabajo realizado por las entidades colaboradoras de la Fundación Educo. En el acto, celebrado en el Salón de Actos del Campus, han participado la presidenta de la asociación, Maribel Lorente, la vicepresidenta, Paloma Manzano, la directora del área de Menores del Ayuntamiento, Toñy Palomo, y Pilar Alba, coordinadora de proyectos de Digmun, han ofrecido una charla sobre la importancia de defender a la infancia, así como sus derechos y se ha presentado diferente material elaborado por la red Educo.

Lorente ha explicado que de las casi 60 asociaciones que forman parte de Educo, “Digmun es la única que suple el trabajo del colegio y lo hemos hecho en un local vecinal, sin agua, sin luz y con voluntarios”.

Digmun-infancia--custom-2Digmun trabaja tanto con mujeres como con sus hijos. Unos menores que tienen un solo deseo: ir al colegio como el resto de niños. La diferencia con los escolarizados no es otro que tener una familia transfronteriza “a pesar de que muchas familias llevan años viviendo en España y los niños han nacido incluso en Ceuta. Son familias que tienen una gran dificultad para acceder a los recursos sociales, educativos y sanitarios de la ciudad”, explica Manzano. También trabajan con los Menores Extranjeros No Acompañados del centro de La Esperanza a través de las aulas de inmersión lingüística. “Lo hacemos desde hace dos años gracias a un convenio con la Consejería de Asuntos Sociales. Son otro perfil de menores, son niños sin familia a diferencia de los “no escolarizados” que tienen familia”.

El principal problema en este asunto es que la sociedad, en general, no es consciente de lo que suceda en la infancia. “No lo era hasta que llegó Digmun y visibilizó lo que sucede. Son las instituciones y organismos quienes tienen que velar por esta infancia proporcionando recursos a todos los niveles”, matiza Lorente.

Por su parte, la directora del área, Antonia Palomo, asegura que la infancia es un tema “complejo de largo recorrido”. Para la responsable del área las cosas “van mejor de lo que iban. Estamos avanzando. Es una tarea difícil que requiere de un gran esfuerzo pero contamos con grandes profesionales”. La infancia es un área en la que aún queda mucho por hacer “en todo el sistema de derechos de la infancia”. Durante su intervención, Palomo ha hecho un repaso de lo que queda por hacer “de los siete saberes de la Unesco de 1999 para que otro mundo sea posible. Si los niños tuvieran más seguridad jurídica y más seguridad en muchos otros aspectos de la ciudad, todo sería muy diferente. De ahí la importancia de contar con asociaciones como Digmun que presionan para que las cosas cambien y contribuyamos a un mundo mejor”.