SERVICIO DE HELICÓPTEROS

La empresa SAAR anuncia que ha cerrado el diseño de horarios y operativos para una futura línea aérea

La empresa cántabra tramita las autorizaciones pertinentes para explotar el servicio de helicópteros entre Ceuta, Algeciras y Málaga. La dirección de SAAR asegura que podría comenzar a gestionar el servicio en pocos días a partir del momento en que se resuelvan los obstáculos que se oponen a su implantación en la ciudad. 

helipuerto ceuta
photo_camera Instalaciones del helipuerto ceutí/ ANTONIO SEMPERE

La empresa de helicópteros cántabra SAAR (Servicios Anfibios Aéreos Rescate), cuya dirección ha mostrado su interés en explotar el servicio de comunicación aérea entre Ceuta y las localidades de Algeciras y Málaga, ha anunciado que ya ha cerrado su diseño de horarios y operativos. SAAR pretende, de este modo, evidenciar su capacidad de comenzar a explotar la línea en el plazo de unos días a partir de que se resuelvan los obstáculos administrativos que impiden su implantación en Ceuta.

Según ha explicado el director gerente de la empresa, Juan Cumplido, el proyecto de SAAR contempla la habilitación de dos tripulaciones que se ocuparían de los turnos de mañana y tarde y de una tercera que cubriría las incidencias que pudieran producirse. La empresa dispondría otros tantos helicópteros, uno de los cuales permanecería en situación de espera en Jerez.

Las estimaciones de la empresa prevén un vuelo de una duración aproximada de siete minutos entre Ceuta y Algeciras y una tarifa que rondaría los 40 euros por viaje.

 

Trámites

El principal obstáculo que se sigue oponiendo a la implantación de SAAR en la línea aérea del Estrecho continúa siendo la necesidad de adaptar el helipuerto de Algeciras a las características de las naves que la empresa pretende utilizar. Los Sikorsky S-92, debido a su peso, no podrían hacer uso de la plataforma actualmente existente en el puerto algecireño. La empresa ha planteado como solución el reforzamiento con una nueva estructura de la instalación o, en la medida en que lo permitan los controles aduaneros a los que deben someterse los viajeros, la dotación de una parcela de 50 por 50 metros para el despegue y aterrizaje de las máquinas.

Cumplido también ha mostrado su decepción con el escaso interés que, asegura, han mostrado las autoridades ceutíes hacia la oferta planteada por su empresa.

El Sikorsky S-92 puede transportar a una treintena de pasajeros.