Vivas alaba la labor de Tragsa en Gran Vía o el Díaz Flor, que llegaron con retraso y rascaron el erario

El presidente de la entidad, Jesús Casas, defiende su carácter "público" como medio de la estructura del Estado, y muestra su interés por seguir trabajando en Ceuta.

GRAN VIA OOK

El presidente de la Ciudad Juan Vivas y el de Tragsa, Jesús Casas- que gira visita oficial por Ceuta un año más tarde-, se han echado flores mutuamente, como coloquialmente se suele decir. Guiños y sonrisas al buen trato de la administración local con la empresa del Estado, y viceversa, y la intención manifiesta de seguir trabajando conjuntamente porque en opinión del jefe del Gobierno de la Ciudad “su mayor presencia ha redundado en un tono positivo”.

Vivas ha defendido a Trgasa como medio propio de la Ciudad, como también se ha obcecado en reiterar Casas al defenderse como “medio público comprendido en la estructura de la Estado”. Un instrumento que para el presidente se traduce en eficacia “que nos permite reforzar nuestro carácter de entidad autonómica”. Y todo ello, para el titular del Gobierno tiene su reflejo en la calle, donde no ha titubeado en describir una hilera de trabajos que la entidad ha desarrollado en la Ciudad desde el año 2017: la Avenida Claudio Vázquez, la pasarela de Miramar, la remodelación de la Gran Vía y Plaza de África, el entorno de San Antonio y la ermita, el polideportivo Díaz Flor o la pista de Atletismo. Todas ellas ya finalizadas, sí. ¿Pero en cuántas cumplió Tragsa la fecha de entrega? ¿A cuánto ascendió el retraso?

Los ciudadanos son olvidadizos, y como se suele decir “a toro pasado…”. Pero la Gran Vía, ya sea por su ubicación o la polémica que desató, sigue rechinando en la memoria colectiva. Un proyecto para algunos “innecesario”, que superó el presupuesto inicialmente establecido, pero que se llegó a catalogar como la obra “inacabable”. Años y años de retraso. Pero no fue la única. La pasarela de Miramar o el Díaz Flor se unen al club de los retrasos vía Tragsa. Este último polideportivo también con un incremento del presupuesto de obra inicial que llegó a duplicarse.

Sin embargo, son pequeños deslices por los que el titular de la entidad ha pedido unas discretas disculpas este miércoles, sin hacer mención a ello, obviamente, y que se ignoran porque la apuesta es seguir haciendo uso de este “medio propio” con el argumentario, en boca del presidente Vivas, de que “está reportando eficacia, eficiencia, transparencia, y un nivel de calidad óptimo desde la perspectiva de los servicios técnicos”.