La paralización de la obra de construcción de la plaza Nicaragua y la situación legal de la misma es un quebradero de cabeza para la Administración Local. El anterior propietario de la parcela presentó un interdicto contra la empresa contratista en los juzgados que desembocó en paralización de la actuación.
Una situación que el Gobierno confía que se resuelva de forma favorable para la Ciudad y que la justicia dictamine cuanto antes, dado que, según ha señalado Juan Vivas, la paralización de la obra está “afectando al interés general”. "Construir la plaza de Nicaragua implica darle satisfacción a un conjunto de vecinos muy notable, que viven en los alrededores de la plaza, y significa dotar de un equipamiento fundamental a una barriada tan relevante desde el punto de vista de la población y de las actividades comerciales como es Hadú”, ha señalado Vivas, apuntando que, solucionar a esta situación, es “un asunto absolutamente prioritario”.
Desde la administración, ha indicado el presidente de la Ciudad, "estamos convencidos de que se ha actuado correctamente, no porque lo digamos nosotros, ni porque estemos condicionados por el interés general, sino porque así lo indican todos los servicios jurídicos”.
Vivas ha recordado que la propiedad se adquirió "legalmente" y que el proyecto contó con la exposición pública y "cuando se adquirió la propiedad hubo ocasión para que el anterior propietario recurriera, no lo hizo”. Así, el presidente de la Ciudad ha vuelto a indicar que “la Ciudad no se va a someter a ningún tipo de chantaje porque alguien pretenda utilizar estas artimañas de índole legal para parar una obra de interés general, nosotros ahí vamos a caminar por el camino de la legalidad y la rectitud”, apuntaba el jefe del Ejecutivo Local ante un problema, el de la plaza Nicaragua que lleva años enquistado.
