Pero el incremento de la plantilla también contará con un aumento de personal laboral, sanitario, técnicos, juristas y psicólogos, explica el sindicalista. Ante esta realidad, González entiende que la apertura del nuevo centro penitenciario de Ceuta “no debe suponer un quebradero de cabeza”, aunque reconoce que “una nueva puesta en marcha siempre ocasiona problemas”.
González explica que los funcionarios destinados en Los Rosales están acostumbrados a “trabajar en una prisión antigua, donde todo se hace manualmente, y van a pasar a un establecimiento nuevo en el que todo funciona de manera mecanizada”.
El representante de UGT entiende que pese a lo dicho, la actual prisión cuenta con una plantilla “muy profesional” y no tiene dudas que sabrá adaptarse a las nuevas circunstancias. González advierte que UGT Prisiones solicita una ampliación de la RPT, “ya que vislumbramos que va a ser insuficiente para acometer la carga de trabajo de un centro penitenciario nuevo”.
González justifica la ampliación de la RPT para el nuevo centro penitenciario debido a que entiende que con el personal existente y los traslados no se van a poder abrir todos los módulos, hecho que “ya ha ocurrido en centros penitenciarios nuevos que se han inaugurado y en otros que se han acometido reformas”. “Puede darse el caso de que la nueva prisión de Ceuta s abra y que algunos departamentos permanezcan cerrados hasta que se reciba personal suficiente”.
UGT tiene el compromiso de Instituciones Penitenciarias para proceder a la recalificación del establecimiento penitenciario, “que pasaría de un dos dos a un uno uno, lo que supondría un incremento retributivo para los trabajadores del nuevo centro”.
Por último, el responsable sindical también desvela que UGT reivindica que el nuevo centro penitenciario cuente con toda la dotación de material necesario, tanto de seguridad como de mobiliario que requiere un establecimiento penitenciario nuevo
