“Si el Gobierno busca la Escoba de Plata que la pague”. Con estas palabras el presidente del Comité de Empresa, Francisco Mur, zanja la polémica surgida en torno al incumplimiento del pliego de condiciones por parte de Trace. Mur no considera justo que se compare el trabajo realizado por Urbaser con el de Trace “porque entre otras cosas había una diferencia de 2,7 millones de euros y al final el dinero se traduce en más servicios”.
El Comité de Empresa de Trace niega que se esté incumpliendo el pliego de condiciones tal y como denunció la pasada semana el portavoz del Gobierno, Jacob Hachuel. Según el presidente se está llevando a cabo el pliego inicial. El problema viene, según ha explicado a Ceuta Actualidad, “porque la empresa y la Ciudad han cambiado varias veces el pliego”. Mur anima al Ejecutivo a sancionar a la empresa si como dicen no se está cumpliendo el pliego. “Lo único que no se está cumpliendo son las ordenanzas municipales. La ciudadanía no coopera, no tira la basura a sus horas, no recoge los excrementos de sus perros. Nosotros limpiamos y en nada se vuelve a ensuciar”, explica el presidente del Comité, quien tiene claro que el Gobierno echa la culpa a Trace “para tapar su mala gestión en todo este asunto y porque no es capaz de sancionar a los ciudadanos que no cumplen con las ordenanzas”.
Mur denuncia que los trabajadores están sufriendo agresiones. Sin ir más lejos el pasado viernes un operario recibió varias pedradas cuando baldeaba la plaza Mina y la calle Beatriz de Silva. “El Gobierno nos exige que la hora de baldeo sea a primera hora y la gente se queja porque los aparatos hacen mucho ruido”, relata a Ceuta Actualidad. Esta no ha sido el único suceso. Hace 15 días en Los Rosales y antes, de nuevo, en Beatriz de Silva. Pero los enfrentamientos con los operarios no acaban aquí. “Los comerciantes también les increpan porque al pulverizar el agua se manchan los escaparates y en vez de hacer un escrito a la Ciudad que es quien ordena limpiar a esas horas, atacan a los trabajadores que no tienen culpa de nada”. Según Mur, es el Gobierno quien marca las pautas y los horarios, algo que sorprende al Comité en tanto en cuanto no se hacía con Urbaser.
