FSP-UGT exige el "cese inmediato" del director general de Recursos Humanos de la Ciudad. El sindicato asegura que Francisco Díaz "pretende recortar los derechos a los trabajadores mintiendo y utilizando la mala fe".
Según una nota remitida por la central sindical, Díaz quiere hacer desaparecer el 3 de mayo como festivo, "dejándolo en un simple día de asuntos particulares para todos los empleados públicos de la Ciudad"
Para ello, continúa el escrito remitido, "esgrime un acta de la mesa negociadora, cuya finalidad era que cuando el día 3 de mayo cayera en sábado o domingo, al personal con jornada de lunes a viernes se le compensara con un día de permiso. La mala fe del señor Díaz es evidente y su cinismo raya en los límites de lo tolerable cuando se pone como escudo para semejante tropelía a las centrales sindicales, mintiendo sin el más mínimo pudor"
Dada la gravedad del asunto, el sindicato anuncia que va a ponerse de acuerdo con CC.OO. y CSIF "para llevar una actuación conjunta de las tres centrales representativas ya que el señor Díaz nos ha puesto a las tres de forma malintencionada como cooperadores necesarios de este recorte de derechos laborales".
Asimismo, FSP-UGT va a pedir la urgente convocatoria de los órganos de representación, tanto de la Junta de Personal, como de los Comités de Empresa de la Ciudad y de sus Organismos Autónomos "para que reprueben y rechacen este tipo de actitudes, más propias de otras latitudes y no descartamos movilizar a todos los trabajadores en defensa de los derechos reconocidos en el Convenio Colectivo".
La lucha del sindicato no se va a quedar en intentar restituir el 3 de mayo como festivo, sino que no van a cejar hasta conseguir que Francisco Díaz deje de ser director general de Recursos Humanos de la Ciudad.
El sindicato espera que el lunes a primera hora la consejera de Economía y Hacienda, Susana Román, haya cesado a Díaz, sino recurrirán al presidente de la Ciudad. "Consideramos como algo prioritario restablecer los cauces de diálogo y negociación entre las Centrales y la Administración y desde luego el actual director general de Recursos Humanos es un obstáculo insalvable para ello.", concluye el escrito.
