La Cala del Desnarigado, popularmente conocida como "La Pota", y la playa de Benítez han merecido 2 de las 47 banderas negras con las que Ecologistas en Acción ha distinguido este año los puntos del litoral español caracterizados por su precario estado de conservación ambiental o su pésima gestión. La asociación conservacionista publica anualmente su informe “Banderas Negras” como una advertencia ante la degeneración medioambiental que sufren algunas zonas de la costa.
El informe justifica la bandera negra asignada a la Cala del Desnarigado en el estado de abandono y contaminación en el que se encuentra este paraje natural. Los ecologistas critican que los trabajos emprendidos por la Ciudad para recuperar la playa para el baño no atienden criterios ecológicos y de conservación. Según Ecologistas en Acción, las actuaciones van dirigidas a su explotación como incentivo turístico, sin alusiones expresas a la necesidad de su protección natural.
Los conservacionistas destacan que, a pesar de la limpieza practicada en la playa el pasado mayo, que permitió la extracción de 2,3 toneladas de basura depositadas en el fondo marino, los residuos han vuelto a acumularse. El informe subraya que el Gobierno de la Ciudad “hace oídos sordos” a las demandas ciudadanas para erradicar las basuras de distintos puntos de la costa ceutí.
Vertido de fuel
La segunda de las banderas negras concedidas por Ecologistas en Acción pretende distinguir la mala gestión medioambiental instada después del vertido de fuel procedente de las instalaciones de Cepsa que a finales de 2014 contaminó desde la playa de Benítez la mayor parte del litoral. El informe lamenta que hayan tenido que transcurrir quince meses desde el suceso para que se abriera expediente sancionador a Cepsa.