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La banca se apunta al despegue inmobiliario con más de 25.000 pisos en todo el país

Las nuevas sociedades nacidas de las antiguas filiales inmobiliarias bancarias, que todavía están presentes en los resultados bancarios, se han erigido como los principales actores que relancen la oferta de vivienda nueva en distintas zonas de España. La venta a través de agresivos descuentos parece quedar atrás y ahora el negocio está en convertirse en promotores

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Estrella Digital

Cómo últimos rescoldos de lo que fue una forma de vida, los esqueletos de hormigón macizo de lo que iban a ser viviendas se alzan por distintas zonas de España. En páramos perdidos o en desiertos olvidados moran esos gigantes armazones a la espera de una nueva oportunidad de vida. La posibilidad de darle salida a dichos monstruos hace un tiempo se veía imposible, ahora muchos de ellos tendrán sus oportunidad.

El doctor Frankenstein, que era el que resucitaba al monstruo, no el monstruo, es la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (SAREB). Pero no es el único, cada vez más actores se apuntan al despegue del sector inmobiliario. Entre ellos, los bancos a través de sus inmobiliarias. Altamira, Aliseda, Solvia, Anida o Neinor ya han presentado planes no sólo para la comercialización de la viviendas que ya tienen en cartera, sino para terminar o construir muchos nuevos.

La gran banca española, a través de sus inmobiliarias, ha sacado o tiene previsto sacar al mercado más de 25.000 viviendas. Los activos se unen a las más de 70.000 casas en stock que poseen y que ya están a la venta en distintas webs.

Al calor de la nueva dinámica del mercado, los precios despegan de manera tímida. Los últimos datos ofrecidos del segundo trimestre de 2016 reflejaban un pleno para el sector: La compraventa de viviendas creció un 13,3%, los precios un 1,3% y las hipotecas un 26,1%. Asimismo, las tasaciones de edificios en construcción ha crecido un 53% en número y un 51% en valor, según la Asociación Española de Análisis de Valor.

El sector no solo ha cumplido con las expectativas sino que va a más. El índice de precios de vivienda de la Sociedad de Tasación, sugiere una proyección al alza una vez superada una fase de estabilización. Eso significa que podría avecinarse un cambio cíclico en los precios del sector. Una proyección que viene ratificada por prácticamente todos los informes que se publican del sector.

 

Vuelve la oferta, vuelve la banca

La dinámica ha vuelto al sector inmobiliario tras años de depresión. Más allá de los datos, no existe mejor termómetro para medir el presente y el futuro del sector que la feria que se celebra en otoño conocida como SIMA. La oferta -construcción de obra nueva- copó el protagonismo, en ella se expuso hasta un 60% más respecto a 2015.

El principal actor será una vez más la Sareb, que entre 2016 y 2017 sacará a la venta cerca de 6.000 pisos de obra nueva. Por un lado, con promociones ya heredadas como ‘Tu casa a toda Costa’ que incluyen más de 2.300 viviendas. Por otro, como promotor -paso que asumió en 2015-. En total, podría sacar a la venta próximamente más de 3.000 inmuebles de obra nueva, en especial finalizando obras ya comenzadas.

El resto de entidades bancarias, que no traspasaron los activos de más valor a la SAREB, también se apuntan. El BBVA sacará a la venta cerca de 6.000 viviendas, LBMN -la fusión de las antiguas Caja Murcia, Caja Granada, Sa Nostra- más de 1.500. Neinor -inmobiliaria de Kutxabank- tiene ya en venta 300 y tiene previsto construir cerca de otras 600 viviendas. Bankia ha comenzado a comercializar otras 2.600 viviendas bajo el lema “Tu Piso”. Altamira (Santander), Servihabitat (La Caixa) y Solvia (Banco Sabadell) han llegado a un acuerdo para sacar a la venta cerca de 2.300 viviendas en la capital. Por último, Aliseda (Banco Popular) expuso en SIMA más de 6.500 viviendas para su construcción y comercialización.

 

Nuevo negocio, pero viejos fantasmas

En principio, las inmobiliarias nacidas del stock inmobiliario bancario han desaparecido de los balances pero siguen suponiendo negocio para ellos. Ahora, son los denominados Servicers, esto es nuevas sociedades nacidas de las antiguas filiales inmobiliarias de la banca y la entrada de capital de distintos fondos de inversión. Son los actores más activos del mercado no solo por actividad sino por el volumen de activos que tienen.

Las sociedades han iniciado una campaña más agresiva para la venta. Cada una apuesta por innovaciones en la venta de inmuebles: Altamira tiene una nueva web, Solvia apuesta por la realidad virtual y Anida por aplicaciones móviles. Incluso algunas entidades como el Banco Popular ya han expresado su deseo de volver a recomprar la parte que vendieron a los fondos.

El cambio de ciclo del sector y el dinamismo resucita viejos fantasmas de una burbuja que tumbó al país. Por ello, la nueva circular emitida obliga a las entidades que sean capaces de identificar caídas de valor significativas. Es más, en su artículo 68 se indica que las firmas deberán contar con políticas y procedimientos escritos, aprobados por el consejo de administración. Con esto se intenta evitar los errores.

Pese a ello, el director general de Caixabank, Juan Alcaraz, alertaba de que algunas entidades financieras están volviendo a financiar promociones repitiendo los mismo errores. Estos son, entre otros: financiar suelos sin licencia o promociones sin preventas. Alcaraz apostilló que “en Madrid y Barcelona se están dando ya operaciones no aconsejables”.