La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no cederá los espacios del Ayuntamiento para el referéndum independentista del próximo 1 de octubre. La alcaldesa ha enviado una carta a la Generalitat para que informe al Ayuntamiento sobre las actuaciones que tienen previstas para garantizar la participación sin poner en riesgo a la institución y los funcionarios. El primer teniente de alcalde de la ciudad Gerardo Pisarello ha confirmado que "los trámites ordinarios para facilitar la votación han quedado afectados por la interlocutora del Tribunal Constitucional".
Colau ha enviado una carta a la Generalitat para que informe al Ayuntamiento sobre las actuaciones que tienen previstas para garantizar la participación sin poner en riesgo a la institución y los funcionarios ahora que el Tribunal Constitucional (TC) ha suspendido el 1-O-.
Además de Barcelona, también existen otros ayuntamientos catalanes que suman al menos tres millones de habitantes y que hasta el momento han guardado silencio o han rechazado la cesión de los locales electorales habituales para la celebración del referéndum de independencia del 1 de octubre, después de que el Tribunal Constitucional haya suspendido su convocatoria.
Se trata, entre otros, de L'Hospitalet de Llobregat, Terrassa, Lleida, Tarragona, Mataró, Santa Coloma de Gramenet, Cornellà de Llobregat, Sant Boi de Llobregat, Viladecans, El Prat de Llobregat y Castelldefels. El nexo entre todas estas localidades es la presencia del PSC en el equipo de gobierno, en algunas ocasiones en solitario y en otras compartiendo protagonismo con otras formaciones, algunas de ellas independentistas.