El nuevo portavoz dice que los ministros que repiten es “porque lo hicieron muy bien”

Íñigo Méndez de Vigo espera que a partir de ahora la competencia de las relaciones con los medios de comunicación, hasta el momento en manos de Santamaría, pase a ser suya. Cree que su nuevo nombramiento como portavoz es porque es uno de los que “lo han hecho bien”

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photo_camera El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de MInistros

El primer Consejo de Ministros de la nueva legislatura ha sido de trámite. Sonrisas, buenas palabras, agradecimientos y elaboración de un calendario aproximado que aún no tiene fechas concretas. Una de las grandes novedades, sin duda alguna, ha sido el estreno de Íñigo Méndez de Vigo, de nuevo ministro de Educación, Cultura y Deporte, al frente de la portavocía del Gobierno. Aún no sabe si controlará las relaciones con los medios de comunicación (a través de la secretaría de Estado de Comunicación) o esa competencia la mantendrá Soraya Sáenz de Santamaría, aunque se ha apresurado a decir, que espera “que sí”. “No lo sé. Yo llevo un rato en este cargo. Si luego resulta que no, voy a quedar fatal”, ha bromeado el ministro.

Es evidente que Méndez de Vigo sabe que controlar las relaciones con los medios de comunicación es poder. De hecho, no hay pocos 'populares' que están convencidos de que “la buena prensa” que tiene Soraya Sáenz de Santamaría es gracias a esta competencia. Por ello, este jueves, cuando Rajoy anunció su nuevo Gobierno y se constató que Santamaría perdía la portavocía, algunas fuentes del Partido Popular lo interpretaron “como una derrota y pérdida de poder”. No obstante, la vallisoletana no sólo sigue siendo la única vicepresidenta, sino que conserva el control del CNI y se le suma otra importante tarea: frenar el proceso independentista catalán.

Méndez de Vigo ha querido dejar claro que el Gobierno es continuista en aquello que durante la pasada legislatura funcionó bien. Ha puesto de ejemplo el área económica, donde repiten los tres ministros del ramo: Fátima Báñez (Empleo), Cristóbal Montoro (Hacienda) y Luis de Guindos (Economía). También ha puesto de ejemplo a la vicepresidenta Santamaría, según el cual, hizo una “labor de coordinación ejemplar”. E incluso ha hablado de sí mismo. “Si a mí se me ha otorgado esta nueva función tan mal no lo habré hecho”. De hecho, el portavoz ha llegado a decir que los ministros que repiten es porque lo “hicieron muy bien”. ¿Eso significa que los ministros que no ha repetido lo hicieron mal?

Pedro Morenés (el ya exministro de Defensa, sustituido por María Dolores de Cospedal) llevaba meses anunciando su intención de no continuar. Claro que en esa misma posicióm se encontraba el económista Luis de Guindos y finalmente ha repetido. Hasta hace un mes, De Guindos seguía insistiendo públicamente en que su intención era dejar la política. Se rumoreó con la posibilidad de que fuera vicepresidente económico, finalmente no ha sido así, pero sí ha sumado Industria a sus nuevas competencias. En este sentido no está claro si Morenés hubiera repetido en caso de que Rajoy se lo hubiera ofrecido, como ha sido el caso De Guindos.

Por lo que sólo quedan dos ministros que claramente quedan excluidos de ese grupo de “ministros que lo hicieron bien” durante la pasada legislatura: Jorge Fernández Díaz, muy tocado por el escándalo de las escuchas a los rivales políticos catalanes. Y el hasta hace unos años su gran amigo, José Manuel García Margallo, considerado el “verso suelto” del Gobierno. Ambos habían mostrado públicamente su disposición a continuar en sus cargos, pero Rajoy no les ha querido en el nuevo equipo. En el PP no descartan que ambos sean “recompensados” con puestos internacionales destacados o alguna embajada, y más aún teniendo en cuenta que el nuevo ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, dejará vacante el puesto de embajador de España para la Unión Europea.

Méndez de Vigo, sin embargo, ha obviado un importante dato sobre su nuevo nombramiento en Educación: apenas pudo hacer nada porque sólo ocupó la cartera con plenos poderes durante seis meses. Su cargo lo ha ejercido durante más tiempo estando el Gobierno en funciones. No obstante, a él le quiso sumar la semana pasada Rajoy el tanto de la “paralización de las reválidas”. Hoy todo el mundo dice de él que es “un gran negociador” y probablemente ése sea el tributo que le ha colocado donde actualmente está. Además de su cercanía a Santamaría. De hecho, a Méndez de Vigo también se le sitúa en el círculo estrecho de poder que controla la vicepresidenta.

El nuevo portavoz también ha querido destacar que Rajoy ha introducido importantes relevos, que a su juicio, vienen a constatar la intención de dialogar del Partido Popular, que pasan a estar en minoría absoluta en el Congreso de los Diputados. En este sentido, Méndez de Vigo ha resaltado que la inclusión en el Ejecutivo de Dolors Monserrat, Álvaro Nadal y Fátima Báñez, miembros los tres del equipo del PP que negoció el acuerdo con Ciudadanos, es un ejemplo más de la disposición de Rajoy a dialogar con todos los grupos parlamentarios, y en especial con el de Albert Rivera, para poner en marcha las 150 medidas acordadas con la formación naranja.

El primer gran reto será aprobar los nuevos Presupuesto para 2017. Pero no será el único. El Gobierno aprobará antes de que finalice el mes de noviembre el nuevo techo de gasto, lo hará de acuerdo al resto de fuerzas políticas, y será el paso previo para intentar elaborar las nuevas cuentas públicas. En el calendario más inmediato también está aprobar las nuevas pruebas que realizarán los alumnos que quieran ingresar en la universidad y que según Méndez de Vigo serán similares a la antigua PAU. También se convocará el Pacto de Toledo y una conferencia de presidentes autonómicos en el Senado. Pero aún no hay fechas concretas para nada ello.