La víctima de origen subsahariano

La Policía libera en tres horas a una joven retenida en Bilbao y detiene a sus dos captores

La víctima de origen subsahariano iba a ser explotada sexualmente por una organización en la capital vizcaína. La mujer realizó una llamada telefónica a un centro de acogida de Teruel alertando que se encontraba encerrada contra su voluntad. 

Coche de la Policía Nacional estacionado junto a la Comisaría (C.A.)
photo_camera Coche de la Policía Nacional estacionado junto a la Comisaría (C.A.)

Agentes de la Policía Nacional han liberado, en el plazo de tres horas desde que se conocieron los hechos, a una joven de origen subsahariano retenida en Bilbao por una organización criminal para fines de explotación sexual. Se tuvo conocimiento de los hechos a través de las relaciones establecidas por la Policía Nacional con las organizaciones encargadas de la asistencia, protección, ayuda y acogimiento a personas extranjeras potenciales víctimas de Trata de Seres Humanos. La víctima realizó una llamada telefónica al centro de acogida alertando que se encontraba retenida y encerrada contra su voluntad en un inmueble en Bilbao, sin especificar localización.

La investigación comenzó cuando agentes de la Policía Nacional de Teruel tuvieron conocimiento de que un grupo de mujeres habían abandonado un centro asistencial en esa localidad para dirigirse a Bilbao. Los policías sospechaban que la joven liberada había decidido marcharse por el dominio que otras mujeres ejercían sobre ella.

Posteriormente, la chica realizó una llamada telefónica al centro asistencial donde comunicaba que se encontraba retenida y encerrada contra su voluntad en un piso de la ciudad de Bilbao. Tras rápidas gestiones, los agentes lograron localizar y liberar a la víctima en un inmueble en el barrio de Las Cortes de Bilbao.

En ese mismo momento fueron arrestados los dos captores, la propietaria del inmueble de origen subsahariano y la persona de origen guineano que había trasladado a la víctima al domicilio, constatando que ambas formaban parte de un grupo criminal asentado en Bilbao dedicado a la trata de seres humanos.

Mujeres retenidas hasta solventar la deuda

La red actuaba a nivel internacional y facilitaba el tránsito de inmigrantes entre África y Europa. Además, se encargaban de recibir, alojar y redireccionar a los migrantes hasta el siguiente punto clave a cambio de una contraprestación económica, que si no era satisfecha, conllevaba la retención de personas hasta que era solventada la deuda.

En España, la organización contactaba con migrantes subsaharianos que llegaban a nuestro país y que eran acogidos en centros asistenciales, para después desplazarlos a otros países Europeos. En el supuesto de que se tratase de mujeres jóvenes, eran sometidas a explotación sexual.