Por mucho que familiares y amigos de los detenidos sigan manteniendo que "eran buenos chicos", las noticias que van apareciendo cada día sobre ellos parecen llevarles la contraria. El último ejemplo es el de Driss Oukabir, que parece que ya había tenido otros problemas con la justicia antes de los atentados en Cataluña.
Condenado como uno de los miembros de la célula terrorista, que está en prisión preventiva, fue a juicio rápido en Ripoll (Girona) por maltratar a su pareja tres días antes de los atentados, sin conformarse con la pena que solicitaba la Fiscalía, por lo que será finalmente juzgado en febrero próximo.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Oukabir, de 28 años, fue detenido el pasado 23 de julio por un delito de maltrato en el ámbito familiar y al día siguiente pasó a disposición del juzgado de instrucción de Ripoll, que dictó una orden de alejamiento de su pareja.
Pese a que su mujer no mantuvo la acusación contra él, la Fiscalía llevó a Oukabir a un juicio rápido en el que le ofreció una rebaja de la pena que le correspondería por maltrato, si se conformaba con la misma y aceptaba los hechos que se le imputaban.
El presunto miembro de la célula terrorista, sin embargo, no aceptó el acuerdo -por el que habría sido condenado en sentencia firme por un delito de maltrato en el ámbito familiar-, por lo que la juez de Ripoll lo ha enviado a juicio el próximo mes de febrero, en el juzgado de lo penal número 2 de Girona.
Oukabir, hermano de uno de los terroristas abatidos en el atentado de Cambrils (Tarragona), se encuentra en prisión provisional desde el pasado miércoles, acusado de forma parte de la célula que perpetró los ataques en Barcelona y Cambrils (Tarragona), a la que supuestamente alquiló las furgonetas.
Precisamente, Oukabir esgrimió su detención para justificar el viaje de nueve días que hizo a principios de mes a Marruecos ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, al que dijo que había tenido que irse al país magrebí por la orden de alejamiento de su pareja que pesaba sobre él.
El supuesto miembro de la célula terrorista pasó en 2012 un mes en la cárcel de Figueres (Girona) como preso preventivo, acusado de un delito de abusos sexuales.
