La vacunación por sí sola no es suficiente para detener el impacto de la variante ómicron del covid, sino que son necesarias medidas "fuertes" para reducir su transmisión y aliviar la sanidad pública, advirtió este miércoles el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC).
Es necesario "proteger a la población más vulnerable" en los próximos meses. No hay tiempo para lograrlo con las vacunas actuales, ha señalado la institución. La UE subraya que el riesgo es "muy alto" para Europa y que la variante será la dominante en todo el continente en los dos primeros meses de 2022.