Aróstegui y Vivas sacan sus peores maneras en el debate de la violencia de género
No ha sido el más intenso, aunque si en el que peores maneras se han usado. El debate de la propuesta de Caballas para impulsar una movilización activa y permanente para combatir la violencia machista ha sido el peor ejemplo que se pueda dar para erradicar los que todos los partidos denominan como lacra.
El enfrentamiento protagonizado por el representante de Caballas Juan Luis Aróstegui, y el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, no ha sido constructivo para nada en este sentido. Las descalificaciones y las manifestaciones oídas en el salón de plenos no son, ni de lejos, el mejor camino para solucionar un problema que en los últimos meses ha provocado que cientos de mujeres se echen a la calle.
Aróstegui, con su astucia dialéctica, ha logrado desencajar al presidente y los integrantes del grupo Popular, sobre todo explica que el discurso de la extrema derecha es aceptado por el líder nacional de los populares, Pablo Casado, “y hace suya esa forma nueva de desacreditar la violencia machista”. “El PP se convierte en un enemigo de las mujeres”, ha dicho Aróstegui.
E localista ha pedido a los populares que dejen claro si “está en contra la violencia machista o no lo están”.
Vivas respondió con contundencia a Aróstegui, calificando la propuesta como un planfleto. “Me parece indecente utilizar a las víctimas para traer aquí un panfleto en contra del Partido Popular”, ha dicho.
El presidente negó que tanto él como ningún miembro del PP sea “de extrema derecha”, acusando al representante de Caballas de usar todo tipo de ardid para “atacar al Partido Popular”.
Aróstegui, después de decirle a Vivas que pone una vela a dios y otra al diablo, insistió en que el PP sólo tiene “que decir que están de acuerdo” con la propuesta en debate.
“Le digo que el Partido Popular, con su presidente nacional a la cabeza, está a favor de la lucha contra la violencia de género”.
Ciudadanos y MDyC criticaron las actitudes mostradas por ambos políticos