Entrevista a la número 2 del Partido Popular de Ceuta

Bel: "La militancia del PP es extremadamente generosa y comprensiva porque sabe adaptarse a los cambios"

La secretaria general del PP de Ceuta piensa que es un error ver los acuerdos como "o estás con unos o estás con otros"

Casi 8 años al frente de la Secretaría del Partido Popular en Ceuta, número 2 de la formación conservadora, virtuosa de la política, docente en ejercicio y leal, sin necesidad de juramento, al presidente Vivas.

Yolanda Bel recibe a Ceuta Actualidad en buena forma política y con el ánimo que ya le conocemos como si los años no hubieran pasado. Todo listo en la acogedora sede de los populares en el edificio Ainara. Empezamos la entrevista.

PREGUNTA. ¿Cómo ve el actual escenario político?

RESPUESTA. No es el más fácil para gestionar y elaborar propuestas políticas viendo la actitud del país vecino y las llamadas de atención continuas que desde el PP y el Gobierno de la Ciudad estamos haciendo al Gobierno de la Nación, que es una pieza fundamental en esta difícil situación.

P. ¿Han tenido que reinventarse?

R. El Partido Popular de Ceuta y el de España no comparte este término. Tampoco lo entendemos. El PP tiene unos cimientos y unas bases muy sólidas y nuestros ejes fundamentales no nos hace ver la necesidad de reinventarnos. La creación de nuevos partidos o las nuevas corrientes no van a hacer que el Partido Popular cambie. Tenemos las ideas muy claras y una larga trayectoria. Es verdad que las circunstancias hacen que los acuerdos puntuales y las decisiones en cada momento vayan variando en función de la situación política, pero eso no quiere decir que tengamos que reinventar el partido.

P. ¿Esas variaciones puntuales cómo las digiere la militancia?

R. La militancia del Partido Popular es extremadamente generosa y comprensiva, porque sabe adaptarse perfectamente a los cambios. Sabe entender las decisiones que en cada momento tiene que tomar su partido y los responsables políticos que gobiernan en cada lugar. Por lo tanto, la militancia siempre va a tener el agradecimiento de los máximos responsables.

P. Me quiere decir entonces que tan de acuerdo están los militantes del Partido Popular en Ceuta cerca del PSOE, como estuvieron en la Asamblea, como ahora de Vox.

R. El Partido Popular está donde siempre ha estado. Las circunstancias son las que cambian. En esta legislatura, no tenemos mayoría absoluta y aun teniéndola, el Gobierno que preside Juan Vivas siempre se ha caracterizado por el diálogo y el acuerdo y nunca ha aprovechado esas mayorías históricas, que creo que difícilmente se vayan a repetir en esta ciudad, porque es casi imposible alcanzar las cotas que Juan Vivas ha alcanzado como presidente de Ceuta. Si con mayoría creo que dábamos muestras de acuerdo, de consenso, de llegar a entendimientos en cualquier materia plenaria que beneficiara a Ceuta, cuanto más nos obliga esta situación de minoría. El PP no se ha movido, probablemente las circunstancias obligan a que otros tengan que cambiar su actitud y bienvenidas sean esas reflexiones y esos cambios si siempre benefician a Ceuta.

P. Han sido acuerdos con la izquierda y ahora acuerdos con la derecha de Vox.

R. El problema está en la visión. Querer establecer como dos acuerdos distintos y esto no es así. El Partido Popular está de acuerdo en llegar a consensos y entenderse con todo el arco parlamentario. Llevamos una propuesta y si se suma y vota a favor Vox, bienvenido sea en beneficio de Ceuta. Si se quiere sumar el PSOE, bienvenido sea. Si se suma MDyC y se suma Caballas, bienvenidos sean. Lo que buscamos es el mayor acuerdo y consenso. Por lo tanto, es un error ver los acuerdos como <o estás con unos o estás con otros>. Esas parcelas, esos bloques de división, creo que ni son correctos ni nos llevaría a lo que pretende el Gobierno en esta ciudad.

Moción de censura

P. ¿Fue un error que ustedes mismos aludieran a la posibilidad de una moción de censura a partir de que se le marchasen a Vox dos diputados?

R. No fue un error. Eran comentarios que se estaban haciendo con una intensidad bastante importante. También los ciudadanos. Nos venían a nosotros, al PP. Independientemente de a quién hubieran votado, rumoreaban ese riesgo que corrían y yo creo que era obligación del PP aclarar a todos los ceutíes, por si alguien tenía dudas o miedos de volver a la inestabilidad política que, antes de que llegara Juan Vivas, siempre ha tenido esta ciudad. Ante esa posibilidad creo que el partido tenía la posibilidad de hablar claro. Y lo hizo a través del portavoz del Grupo Popular y vicesecretario del PP, Carlos Rontomé. Hablar con claridad lo agradecen los ciudadanos. Decir sin tapujos lo que contiene todo eso que oyen en realidad y la certeza de las cosas, creo que nunca está mal.

P. Parecía impensable que el resto se pusiera de acuerdo.

R. Nosotros no estábamos en eso. Pensable o impensable. No lo sé. Eso lo tiene que decidir el resto de grupos que probable o improbablemente intentaban sumarse. Nosotros no perdimos ni un ápice de nuestras fuerzas y energías en pensar si la habría o no. Eso les correspondía a otros. El Partido Popular tiene un reto en la Asamblea mucho más importante que ese, que es gobernar para todos los ceutíes.

P. ¿Hace falta tener cintura en estos momentos, no cree?

R. Sí. Tenemos la mano tendida y la voluntad de llegar a acuerdos, pero también la oposición juega un papel fundamental. Y tiene una gran responsabilidad sobre sus hombros y sus espaldas. Los ceutíes no sólo miran al Gobierno; exigen responsabilidad a la oposición. Y la oposición también tiene que responder y tiene que dar muestras de si quieren estabilidad para esta ciudad o haciendo posible la gobernabilidad o si quieren hacer una guerra partidista, haciendo imposible el Gobierno de Ceuta. Cada uno tiene que rendir cuentas cada día, pero también dentro de cuatro años de la gestión y los posicionamientos que ha tomado en cada momento.

P. Dígame la verdad. ¿Sentó mal el anuncio que hizo hace meses el presidente Vivas de que no pactaría nada con Vox? ¿Hubiera sido mejor no haberlo anunciado?

R. Juan Vivas fue muy claro. Si se calla hubiera ocultado a los ceutíes cuál era su posición. Tenía claras dos cosas y quiero decir que lo tenía claro, pero con una salvedad, con el apoyo de la Junta Directiva (máximo órgano entre congresos) y de todos los miembros de la lista electoral que le acompañaban. Porque él antes de esas manifestaciones, hizo la consulta a estos dos órganos. Y los dos avalaron por unanimidad y respaldaron ese posicionamiento. Fueron dos evidencias, una que no iba a llegar a acuerdos con ningún partido (se llamara como se llamara) que actuara en contra de la convivencia en Ceuta y, por otro lado, había dos partidos en ese momento (y me refiero a ese momento) que eran Vox y Caballas, que estaban moviéndose en unos discursos que no aportaban nada bueno a la convivencia en Ceuta. La franqueza del presidente la agradecieron los ceutíes porque en menos de un mes, el PP pasó de la tercera a ser la primera fuerza nuevamente en unas elecciones locales.

P. No se fue en la línea de otras comunidades y ayuntamientos.

R. Nuestro partido no es un partido que impone. En nuestro partido, afortunadamente, no todos somos iguales y no estamos todos cortados por el mismo patrón. Esa es la riqueza del Partido Popular. Somos diversos, somos distintos, opinamos cada uno desde nuestro punto de vista y se respeta. La nuestra es que en la mayoría de parlamentos regionales y autonómicos había un acuerdo prácticamente tácito con Vox y aquí se respetó perfectamente nuestra posición de <aquel que rompiese o tuviese un discurso contra la convivencia no iba a contar con el PP>.

P. ¿Piensa que la minoría les está haciendo mejores?

R. Aunque parezca soberbia, mejores no porque creo que el Partido Popular nunca ha sido malo. Sí nos ha abierto -probablemente- nuevos caminos y con mayor intensidad en intentar acordar más horas de dedicación, porque tienes que sentarse con el resto de fuerzas políticas y tienes que hacer ver que tus propuestas van por buen cauce. A veces todo eso lo tienes que confrontar con una idea muy distinta a la tuya, otras veces con posicionamientos más cercanos, y eso lleva tiempo, horas y una mayor reflexión. Visto así, como que la reflexión nos hace a todos mejores, desde luego nos abre más la mente, no sólo al PP sino a todos aquellos que quieren llegar a acuerdos y entendimientos.

Marruecos

P. ¿La llamada asfixia a la economía de Ceuta por parte de Marruecos, nos abre por fin los ojos para trabajar por ser independientes del país vecino?

R. Marruecos nada tiene que ver con España y es un país con el que nosotros siempre hemos tenido querer buenas relaciones, pero yo creo que para que haya una buena relación las dos partes deben querer. Ceuta ha dado sobradas muestras de querer tener un buen entendimiento a lo largo de los años, pero –sin embargo- Marruecos ha estado dando muchos portazos a España a través de Ceuta y Melilla. Últimamente, los últimos meses, están llegando ya las gotas que colman el vaso. Por lo tanto, espíritu de acuerdo, siempre. De buen entendimiento, siempre. Pero nunca supeditados ni sometidos a lo que quiera un país extranjero, al que respetamos. Nosotros miramos para España porque Ceuta y Melilla son España y Europa.

P. ¿Debe preocuparnos más de la cuenta este asunto?

R. Yo sí le digo que las autoridades locales, y espero que el Gobierno de la Nación también, están ocupados y preocupados. Por lo menos, a nivel local se están preocupando. Están diseñando diferentes medidas a corto, medio y largo plazo que permitan que –definitivamente- nunca se nos pueda apretar desde el otro lado de la frontera y que esta ciudad siempre sostenga su futuro soportado y apoyado desde adonde pertenece que es España y Europa. <Usted se quiere entender conmigo como vecino, perfecto; pero que sepa que mi casa me la tiene que respetar. Si no es así, usted no se quiere entender conmigo. Y, por lo tanto, si dos no quieren entenderse, porque hay una parte que no quiere, mi voluntad también tiene un límite>.

P. ¿Qué hemos hecho para merecernos ese cambio de actitud?

R. Ceuta y Melilla, como dos territorios españoles, siguen siendo los mismos con las mismas políticas y formas de actuar y el mismo respeto hacia Marruecos. Ellos tendrán sus motivos. No voy a entrar a analizarlos porque ni los conozco. La evidencia es que no quieren el entendimiento y parece que a través de los hechos están tomando medidas con la intención de asfixiar a Ceuta y Melilla, acordadas de manera unilateral. El acuerdo entre los dos países parece que se corta por voluntad de Marruecos. Ese porqué habría que plantearlo allí, pero sin nerviosismo. A mí me pondría nerviosa y me preocuparía en extremo que mi país y la UE nos abandonara, se despreocupara o se tomarán medidas que no beneficiaran a esta ciudad. Pero que lo haga un tercer país, me preocupa relativamente.

P. Luego confía en el Gobierno de España.

R. Yo quiero confiar, pero decirle que confío plenamente vendrá dado por los hechos. No porque sea de un color político u otro. Creo que la lealtad institucional del Gobierno de Ceuta siempre se ha tenido para el Gobierno de la Nación independientemente que éste haya sido PP, PSOE o ahora que es PSOE-Podemos. Pero también creo que los hechos puntuales que ha tenido últimamente el Gobierno de la Nación con esta ciudad, en lo referente a transferencias que estaban garantizadas con el PP para Ceuta, son que no han llegado. Eso me ha abierto un interrogante en esa confianza que yo debería tener en el Gobierno de España. Los hechos y la manera de actuar dirán por sí mismos si podemos confiar y contar con su apoyo al cien por cien.

P. ¿Esperaba algo más de los recientes viajes oficiales del Gobierno español a Marruecos?

R. Aquí no se ha informado a nadie de lo tratado en esas conversaciones con Marruecos. De lo que ocurra al otro lado de la frontera ni opino, pero le digo que en lo que se refiere a nuestra frontera, a ver si de una vez por todas podemos hablar de tener una frontera europea, tanto en recursos materiales como humanos, así como en la propia infraestructura. Y seamos claros y, si ha llegado el momento, hablemos contundentemente de ciertas medidas que hay que tomar para que nuestra frontera deje de ser lo que venía siendo hasta ahora, un coladero. Sé que esta palabra a muchos les va a molestar y es una palabra poco elegante, pero creo que si se nos requiere una frontera, convirtamos esto en una frontera de Europa con todas las letras y que se cumplan todos los acuerdos establecidos, aplicándose todas las medidas. Tengamos una frontera pero de verdad y no lo que teníamos hasta ahora, y ahí la UE cuenta y el Gobierno de España juega un papel fundamental. De esa frontera derivan muchas cosas que redundan en la vida de los ceutíes, llámese inmigración ilegal o menores extranjeros no acompañados. Creo que durante más tiempo no se puede permitir que no se apliquen los tratados suscritos por Marruecos. Posiblemente haya llegado el momento de que los vecinos de Tetuán tengan que venir con visado; probablemente tengamos que plantearnos que los puestos de trabajo que ocupan personas de Marruecos en Ceuta, sean de una vez por todas ocupados por ceutíes. Porque hay mucho paro.

Convivencia

P. ¿Se ha resentido la convivencia?

R. La convivencia hay que cuidarla mucho. Es nuestro mayor tesoro. Ese compartir los sentimientos, los estados de ánimo, las opiniones, el tener amigos, familiares de distintas culturas y creencias, eso en ningún sitio de España se da con la intensidad que se da en Ceuta.

P. ¿Pero está resentida? Se ha celebrado una concentración y se ha convocado otra manifestación. Han salido a la luz unos comentarios racistas...

R. Soy una defensora a ultranza de la convivencia porque creo en ella y vivo en ella. A mí, nadie me tiene que enseñar qué es convivencia, pero cuando algunos intentan hacer tambalear la convivencia, hay que preguntarse por qué. Y qué intereses hay detrás de aquellos que quieren romper la convivencia. Esta es una reflexión que requiere de un debate muy profundo porque no todo el mundo –probablemente- quiera que Ceuta siga viviendo en paz, armonía y convivencia. Y habría que preguntarse quiénes y por qué. Pero yo confío en que la amplia mayoría de los ceutíes, de todos los credos sin exclusión, queremos vivir en paz. Hemos dado sobradas muestras de ello a lo largo de los años. Lo llevamos en la sangre. Y aquellas personas que intentan con mensajes indirectos hacer tambalear esa convivencia afortunadamente creo que son mínimas y muchas ni pertenecen a esta ciudad porque viven en otros lugares, en otros países, Yo estoy convencida de que la fuerza y el sentimiento que tiene profundo cada ceutí de seguir haciendo florecer y mantener la convivencia, siempre ganará a esos pocos que intentan hacerla tambalear. Estoy segura.