el órgano de dirección de la formación se constituyó en septiembre

Dos miembros de la gestora de Vox renuncian críticos con la falta de programa y el trato a las religiones

La gestora de la formación de ultraderecha Vox ha sufrido sus dos primeras bajas desdeq ue se constituyera el pasado septiembre. Carlos Alonso y Claudia Avendaño han renunciado a sus responsabilidades alegando que el partido carece de un programa político para la ciudad. 

El presidente de la gestora de VOX en Ceuta, Juan Sergio Redondo (C.A.)
photo_camera El presidente de la gestora de Vox en Ceuta, Juan Sergio Redondo (C.A.)

Los abogados Carlos Alonso y Claudia Avendaño abandonaron hace mes y medio sus responsabilidades en la gestora de Vox con críticas a la organización por la falta de un programa político para Ceuta. Alonso y Avendaño, que son matrimonio, asumieron el pasado septiembre las áreas jurídica y de acción social, respectivamente, tramitan actualmente sus bajas del partido.

“No estábamos de acuerdo con que no hubiese un programa político para Ceuta –explica Carlos Alonso- Se nos decía que el programa era el mismo para toda España, pero es obvio que Ceuta tiene unas necesidades que son exclusivas de la ciudad”.

El exmiembro de la gestora también muestra su rechazo por el trato que la dirección ceutí de Vox ha dispensado estos meses a las comunidades no católicas de la ciudad. “No querían, por ejemplo, felicitar las fiestas de otras religiones; yo soy católico, pero tengo amigos que son primero amigos y luego ciudadanos que rezan a quien a ellos les da la gana”, continúa Alonso.

El abogado, que califica a Vox como “un partido vacío de contenido a nivel local”, ha censurado la actitud hipercrítica exhibida por la dirección de la formación que, a su juicio, no ha ido acompañada de propuestas políticas. Alonso confiesa su “tremenda desilusión” con una aventura política que apenas ha durado dos meses. “Nunca he buscado un cargo ni quería ir en las listas, sólo quería trabajar por Ceuta, pero para estar de palmero no estoy; con este partido no vamos a llegar a ningún sitio”, lamenta.

Alonso también ha puesto en cuestión la dependencia del partido en Ceuta con la organización en Madrid, un mal que atribuye a todas las formaciones políticas de ámbito estatal establecidas en la ciudad. “Parece claro que la única solución para que se tome en serio a Ceuta es un partido local e independiente”, valora el abogado.