“Provocará oleadas de desahucios y la criminalización de la gente pobre”. Estas son las consecuencias que a juicio de Caballas tendrá la aplicación del nuevo reglamento de alojamiento alternativo que prepara el Gobierno de la Ciudad.
Las modificaciones introducidas en el reglamento contemplan, entre otras correcciones al texto vigente, una reducción de 60 a 36 meses del periodo máximo durante el cual se puede disfrutar de las ayudas al alquiler.
“Es una aberración dejar en la calle a cientos de familias por desarrollar una política presupuestaria basada en recortes sociales”, ha lamentado el coordinador de Caballas, Mohamed Alí, quien ha recordado los elevados índices de exclusión social que se registran en la ciudad.
El texto precisa que los recursos económicos de las familias serán considerados suficientes cuando el resultado de descontar de estos la renta que se ha de abonar en concepto de alquiler suponga el 60% de todos los ingresos.
