Medida que planteará como urgente al pleno de la Asamblea

Caballas pedirá al pleno un centro de menores "digno" con una plantilla sólida

A juicio de Caballas se tiene que diseñar un proyecto integral de atención a los menores extranjeros que contemple todos los aspectos relacionados con su formación e integración social. 
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photo_camera Menores en el campamento provisional de Piniers (C.A./ARCHIVO)

Caballas propondrá al pleno de la Asamblea que se adopten una serie de medidas urgentes con respecto a la política de menores en Ceuta. 

En primer lugar, Incluir en el próximo Presupuesto de la Ciudad la dotación económica para la construcción de un centro de menores que reúna condiciones y equipamientos para atender con dignidad a este colectivo.

Ademas, que se amplíe y consolide la plantilla del Área de Menores para cumplir las obligaciones derivadas de la Ley del Menor.

Y en tercer lugar, que se diseñe un proyecto integral de atención a los menores extranjeros que contemple todos los aspectos relacionados con su formación e integración social.

En el cuerpo de la propuesta Caballas explica que "hace aproximadamente tres años, el Gobierno de la Ciudad decidió dar un giro radical a su política de menores, en especial a la relativa a la atención de los menores extranjeros. Como si del hallazgo de la piedra filosofal se tratara, el Presidente Vivas ideó un entramado argumental basado en esencia en alterar las prioridades y anteponer la condición de inmigrante a la de menores de estas personas, lo que llevaba de manera directa y lógica a desentenderse del problema. Así, la responsabilidad que la ley asigna de manera indubitada a la Ciudad en la gestión de menores, se desplazaba a la administración general del estado. Comenzó de esta manera una campaña para demonizar desde la propia institución a los MENA alentando a sectores de la población asustados o molestos por la presencia de estos menores sobre todo en nuestras calles. Caballas fue especialmente beligerante con este posicionamiento político; pero se impuso el criterio del PP (mayoritario). De esta manera, la intención de construir un centro se desechó (el proyecto por importe de siete millones de euros está redactado y en un cajón), y con ello cualquier intento de hacer una gestión mínimamente decente. Todo el esfuerzo se puso en exigir al Gobierno central. Exigir que construyera un centro, que transfiriera fondos, que cambiara las leyes, que hiciera cumplir el acuerdo de devolución firmado con Marruecos". 

Este grupo político en su exposición de motivos añade que "¿cuál ha sido el resultado de esta política? ¿Hay menos menores? ¿Están mejor atendidos? ¿Se han repatriado? El resultado es un rotundo fracaso. Sin paliativos. Todo ha quedado en meras proclamas de consumo interno sin incidencia alguna en el curso de los acontecimientos. Hay más menores que nunca. Están peor atendidos. Las instalaciones “provisionales” (que conociendo la forma de funcionar del Gobierno durarán treinta años) son una auténtica vergüenza impropia de una Ciudad moderna que gestiona trescientos millones anuales. No olvidemos (esto es muy importante) que se trata de una competencia que la Ciudad debe ejercer de manera obligatoria. Este es el desahogo de unas instalaciones, también provisionales, que el propio Gobierno reconoce que no reúnen condiciones (sustituyeron improvisamente a otras por orden de la Fiscalía ante el hacinamiento al que estaban sometidos los jóvenes en un chalet cedido por el ejército)".

Caballas se pregunta si "¿hacen falta más pruebas para llegar a la conclusión de que la política del Gobierno de la Ciudad respecto a los Menores Extranjeros es un absoluto desastre?". Aseguran que "ha llegado el momento de reconocer errores, corregir y hacer las cosas bien”.