Una «cámara soviética» sometida a la voluntad del «dictador» Juan Vivas donde todos los grupos políticos, excepto Vox, participan de una «componenda» de la que sacan beneficio. Esta es la descripción que el líder de Vox, Juan Sergio Redondo, ha ofrecido este jueves en rueda de prensa de la Asamblea de Ceuta.
Redondo ha criticado a todas y cada una de las fuerzas políticas representadas en el pleno de la Asamblea, a las que ha acusado de coartar la acción política de su partido en connivencia con Vivas. El líder de la ultraderecha local, en su crítica a la Asamblea y al reglamento que ordena su funcionamiento, ha cuestionado la triple condición de Vivas como presidente de la Asamblea, líder del Grupo Popular y presidente del Gobierno de la Ciudad haciendo una intrigante referencia a Montesquieu y al principio de separación de poderes. Redondo ha reclamado mayores competencias para el pleno municipal. «La actual situación es la de una cámara donde solo está representada la voluntad de Juan Vivas que ni siquiera es ya de la PP», ha sostenido el portavoz de la extrema derecha ceutí.
El líder de Vox no ha olvidado atribuir un papel cómplice en este «sistema» a los medios de comunicación, a los que ha acusado de «tergiversar» las intervenciones del portavoz del partido en el pleno, Carlos Verdejo, a quien ha presentado como un representante público víctima del boicoteo de los diputados del resto del plenario. Redondo ha criticado que los medios de comunicación sacan de contexto intervenciones de Verdejo que son respuestas a supuestas provocaciones de otros diputados. Los medios locales, por ejemplo, se hicieron eco esta semana de unas palabras del portavoz de Vox en las que sugería que la vestimenta de la diputada musulmana Fátima Hamed podía ser confundida con un disfraz de Carnaval.
Redondo, que durante su intervención en la rueda de prensa se ha referido en decenas de ocasiones al presidente Vivas como «dictador Vivas» ha asegurado: «No se puede dialogar con una dictadura».
