“No es digno de un estado de derecho que los hombres sean encerrados por la mera acusación sin pruebas, por el hecho de ser hombres”. Éste es uno de los argumentos que la dirección de Vox Ceuta ha empleado en un comunicado para justificar su propuesta de derogar la Ley contra la Violencia de Género. La nota pretende ser una respuesta al manifiesto nacional suscrito por organizaciones feministas contra el ideario de la formación de ultraderecha que esta mañana ha leído en la biblioteca “Adolfo Suárez” la presidenta de Mujeres Progresistas, María Miaja.
Vox llega a calificar el contenido del manifiesto de “insultos y veladas amenazas” y arremete contra las organizaciones feministas, a las que acusa de montar “un entramado millonario de chiringuitos lucrativos” en torno a la ley aprobada por el Congreso de los Diputados para proteger a las mujeres víctimas de violencia machista.
La formación de extrema derecha sostiene, utilizando los datos difundidos por su propio secretario general, Javier Ortega, que la Junta de Andalucía sólo invierte el 2,8% del presupuesto del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) en atención a las víctimas de la violencia de género. El programa electoral de Vox propone la eliminación de este organismo, prueba, a juicio de los ultraderechistas, del despilfarro de la Administración andaluza. Junto al IAM, Vox también quiere acabar, entre otros, con el Instituto Andaluz del Flamenco, el Instituto Andaluz de la Juventud y el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo.
La formación asegura en su nota que su propuesta pasa por sustituir la Ley de Violencia de Género por una llamada ley de violencia intrafamiliar. Vox insiste en la existencia de lo que denomina “ideología de género” que, a su juicio, criminaliza al hombre. “Es necesario un cambio de paradigma en el enfoque de la lucha contra la violencia más allá de la criminalización de un sexo frente a otro o del quebrantamiento que se lleva a cabo por estas leyes del artículo 14 de nuestra Constitución, que consagra la igualdad entre hombres y mujeres”, mantienen los ultraderechistas en su nota.
A continuación, el comunicado carga contra la presidenta de Mujeres Progresistas, a quien afea su militancia en el PSOE y cuyas palabras hoy en la biblioteca califica de “amenazas”. “A las amenazas como las recibidas hoy en Ceuta responderemos, sin darles el lujo, a nuestros enemigos parásitos de las arcas públicas, de conseguir amedrentarnos con sus injurias e ingenuos intentos de intimidación”, advierte Vox.
