“El ataque más grave a la historia de la democracia en Ceuta”. Así ha definido el presidente de Vox, Juan Sergio Redondo, la decisión de la Mesa de la Asamblea de retirar del orden del día del pleno programado para este viernes la aprobación del calendario laboral. Los diputados de Vox, que han abandonado el salón de plenos tras conocer la noticia, han convocado una rueda de prensa en la que han arremetido contra el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, y el resto de formaciones políticas representadas en la Cámara.
“Nos preocupa el futuro de la democracia en Ceuta”, ha llegado a asegurar Redondo, cuyo grupo había mostrado su rechazo a la propuesta avalada por PP, PSOE y Caballas para aprobar un calendario laboral que incluye la Fiesta del Sacrificio y el Fin de Ramadán como jornadas no laborables. Finalmente, el presidente Vivas se ha remitido a las competencias que posee para aprobar por sí el calendario en el Consejo de Gobierno sin necesidad de su debate plenario.
La andanada de ataques contra Vivas y el resto de formaciones que Vox ha lanzado durante la rueda de prensa ha tenido como portavoz al cabeza visible de Vox en el pleno de la Asamblea, Carlos Verdejo. El diputado de la formación de extrema derecha ha acuñadoel término “vivismo”, que ha definido como una época en la que se ha intentado “quebrar la españolidad de Ceuta” y que dejará tras de sí un “legado marroquinizador”.
Verdejo ha recurrido a todos los tópicos que vienen aderezando los mensajes de su formación en los últimos tiempos –entre los que no ha faltado la alusión a la “alianza” de Vivas con Mohamed VI- para concluir que el presidente de la Ciudad ha querido desnaturalizar la “españolidad” de la ciudad: “Ha querido darle a la cultura marroquí estatus de española”.
El portavoz de Vox ha denunciado un presunto acoso a su formación, en cuyo origen ha situado en el “lobby promarroquí”, al diario “El Faro” y a un “grupo de individuos con poder económico”.
