La insatisfacción ancestral que sienten los ceutíes ante la calidad del servicio prestado por las navieras en la línea del Estrecho se hace patente, sobre todo, durante aquellas fechas en la que las previsiones anuncian incrementos en los flujos de viajeros. A los retrasos y a las no tan inusuales averías se unen incrementos en los precios de los billetes que, en cualquier otro servicio de transporte, nadie dudará en considerar abusivos.
El dispositivo de la Operación Paso del Estrecho constituye uno de esos acontecimientos especiales en los que las tarifas establecidas por las navieras suelen experimentar un incremento notable. Según el calendario diseñado por los responsables del Paso del Estrecho, operativo que ya se encuentra en plena fase de retorno, el próximo fin de semana se registrarán las mayores aglomeraciones en el puerto de Ceuta.
La Capitanía Marítima de Ceuta deberá decidir entonces si decreta o no la intercambiabilidad de los pasajes entre navieras, una medida ideada para garantizar la fluidez del tránsito de vehículos e impedir que se produzcan atascos en el recinto portuario y el resto de la ciudad. Los ceutíes mantienen la queja permanente de que las navieras aprovechan esta medida excepcional para aplicar subidas desmesuradas en los precios de los pasajes.
Pero sin intercambiabilidad ni circunstancias especialmente excepcionales, el viajero que desee utilizar los servicios de algunas de las navieras que cubren la línea del Estrecho se verá desconcertado por la variabilidad de los precios.
Ayer mismo, un billete de residente ida y vuelta a bordo del Avemar II, de la compañía Baleària, pasaba de costar 66,03 euros a 110,83. La tarifa de 66,03 se mantiene para el Passió per Formentera: esto es, una diferencia de 44,80 euros entre uno y otro barco por reducir el tiempo invertido en el viaje entre 20 y 25 minutos.
Presupuestar el coste del viaje para un no residente entraña un esfuerzo económico mayor. Viajar este sábado con coche desde Ceuta en el rápido de Baleària eleva su precio hasta los 138,31 euros; hacerlo en el Passió reduce la cuenta hasta los 95,56.
Los precios en el resto de las compañías rondan en torno a los 70 euros ida y vuelta para el residente con coche (70,02 en Armas-Trasmediterránea y 66 en FRS) y se sitúan entre 70 y 76 euros ida para los no residentes con vehículo.