Sobre la Esclerosis Lateral Amiotrófica
La ELA afecta aproximadamente a 5 de cada 100.000 personas en todo el mundo y aparece con más frecuencia después de los 50 años, pero pueden empezar en personas más jóvenes.
La ELA afecta aproximadamente a 5 de cada 100.000 personas en todo el mundo y aparece con más frecuencia después de los 50 años, pero pueden empezar en personas más jóvenes.
Según explica el Dr. Santiago Toscano, “El diagnóstico es fundamentalmente clínico y la mayor parte de los esfuerzos en este sentido como analíticas, resonancias o TAC, están orientados a descartar la presencia de otro tipo de patologías. Más información puede dar un electromiograma que orientará de forma más específica sobre el tipo de afectación neurológica que estamos observando”.
No se conoce una cura eficaz para esta enfermedad. El Riluzol ayuda a retardar los síntomas y prolonga ligeramente la vida, pero no evita la evolución. Los tratamientos intentan básicamente controlar los síntomas con fármacos como el Baclofeno o Diazepam para controlar los espasmos musculares o el Trihexifenidil o Amitriptilina para personas con problemas para deglutir su propia saliva
Santiago Toscano añade que “por otra parte la fisioterapia y los dispositivos ortopédicos, y en las etapas finales, la ventilación mecánica, pueden ser necesarios para conseguir mejorar mínimamente la calidad de vida en estas personas, con frecuencia, para conseguir una alimentación e hidratación suficientes, dado que la deglución se vuelve imposible, y se necesita la colocación de una sonda directamente al estómago”.
En Ceuta, en lo que va de año han sido ingresados tres pacientes con este diagnóstico y en 2017, lo fue uno.
Santiago Toscano añade que “Se trata de una enfermedad con un componente emocional dramático no solo para el enfermo sino para todo su entorno, porque se trata de paciente que sufre un deterioro rápido y progresivo de su situación, manteniendo la mayor parte, el intelecto intacto, con necesidad de fuerte apoyo, no solo material sino psicológico, para el propio paciente y para los familiares y cuidadores”.