El origen de Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía (C’s) está en su nombre. No nace desgajado de un partido político ya existente ni hay un político despechado fundando un nuevo proyecto.
Su origen es una plataforma cívica que surge en la Cataluña de 2005, la del llamado Gobierno Tripartito, la de la reforma de su Estatuto. Un grupo de intelectuales y profesionales que, uniéndose, reaccionan frente a una realidad política que pretendía imponerse en todos los ámbitos de la sociedad como un «nacionalismo obligatorio» que anulaba en el día a día la libertad de opinar y de elegir a los que pensaban de otra manera. En 2006 esta plataforma se organiza como partido político con la intención de ofrecer representación a los ciudadanos de aquella Comunidad que, sintiéndose españoles, no se sentían atraídos por la oferta política de la única fuerza no nacionalista existente. Y nace con el nombre de Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía.
El sentimiento de que se contaban con un proyecto político que rebasaba el ámbito catalán está presente desde el primer momento. No se trata de una estrategia de los últimos años, meses para algunos. En las elecciones municipales de 2007 ya presentaron candidaturas, además de en numerosos municipios catalanes, en Alicante y Salamanca. Y también se presentó a las elecciones generales de marzo de 2008. La Agrupación de Ceuta se constituyó y dio a conocer en el año 2009. Ciudadanos está lejos de ser fruto de las circunstancias.
El origen y el presente de Ciudadanos es, pues, la sociedad civil la cual se organiza con intención de intervenir en la vida política dominada por los partidos habituales. Por eso insistimos en que no somos políticos al uso, sino ciudadanos, vecinos en este caso, que intervienen en la política. Ni pretendemos revanchas ni enfrentamientos con estos partidos que han estado presentes en la reciente historia de España.
C’s rechaza situarse en el eje izquierdas-derechas por considerarlo alejado de la realidad del siglo XXI. Pero puede definirse como un proyecto de centro, liberal en lo económico (protección y fomento de la iniciativa privada, la empresa como fuente de riqueza para la sociedad…) y socialdemócrata en lo social (defensa del Estado del Bienestar, educación y sanidad pública y protección pública para los más desfavorecidos…). Y con una clara vocación de diálogo porque entendemos que los intereses de los ciudadanos se deben anteponer siempre a los de los partidos, incluido el propio.
Además, se palpa que estamos en un momento clave, de cambio. Las votaciones que tenemos por delante, municipales y generales en nuestro caso, serán más que escoger entre las distintas candidaturas. El fin del predominio y alternancia de los dos grandes partidos, de las mayorías absolutas que usan de la estabilidad para generar imposiciones y abusos defendidos frente a todos, del intencionado beneficio que el sistema electoral ha proporcionado a los partidos nacionalistas en la historia de nuestra Democracia sólo necesitan el refrendo de las urnas.
No somos localistas. Nuestro proyecto es más amplio. Ciudadanos nos presentamos en Ceuta formando parte de un partido que ofrece una renovación a nivel nacional al que ya numerosos ceutíes nos hemos sumado. Un proyecto de regeneración, con valores
Y nos sentimos arropados por compañeros que, al otro lado del Estrecho defienden y, ya en algunos casos, ya ponen en práctica los principios que defendemos. No se pacta por el poder, se pacta para que las cosas no sigan igual.
También en nuestra ciudad.
