24 horas después de que se celebre una concentración contra las agresiones al personal sanitario, CCOO denuncia una nueva víctima. En este caso, una trabajadora del Centro de Salud de Otero.
El sindicato asegura que la trabajadora ha sufrido una agresión verbal acompañada de amenazas de muerte mientras hacía su trabajo. La afectada ha puesto la denuncia correspondiente.
"A nivel moral es especialmente condenable la agresión a personas que trabajamos cuidando y curando a los demás. Volvemos a reiterar que es necesario un completo sistema de videovigilancia y de dispositivos de alarma interna lo más generalizado posible. Coordinar con los cuerpos de seguridad para que todos los centros sanitarios sean considerados dispositivos de especial vigilancia con la presencia lo mas permanente posible de fuerzas de seguridad. Una total asequibilidad policial de tal forma que, cualquier equipo de centros de salud o de servicios de urgencia, ante la sospecha de posibilidad de situación conflictiva, puedan requerir la presencia previa de agentes de la autoridad en el momento de acudir a algún domicilio. Un mayor número de vigilantes de seguridad dotados de medios para hacer frente a personas armadas. Continuar en la formación del personal e iniciar campañas públicas de concienciación".
