tras lo sucedido el año pasado

Sanidad contará con la Asociación de Diabéticos para la organización del próximo campamento

La Consejería quiere que la Asociación de Diabéticos participe activamente en la organización del próximo campamento para niños tras la mala experiencia del año pasado cuando los padres denunciaron "mala praxis" por parte del equipo médico encargado del cuidado de estos menores.

FOTO NIÑOS campamento
photo_camera El año pasado la consejera y el presidente visitaron el campamento que terminó con sendas denuncias por parte de los padres / ARCHIVO

La Consejería de Sanidad contará con la asociación de diabéticos de la ciudad para organizar el próximo campamento para niños. “Queremos que participen activamente y que marquen los criterios que crean oportunos para que el campamento se desarrolle sin problemas y con todas las garantías”, explica la consejera, Adela Nieto, quien asegura que “cada año organizamos el campamento con todos los parabienes y criterios según los pliegos de los técnicos”.

Nieto se ha mostrado prudente con respecto a la responsabilidad de lo sucedido y si hubo mala praxis “ya que el asunto está judicializado”. Precisamente por ese motivo se decidió suspender el expediente iniciado por la consejería. “Entendemos que de momento lo mejor es esperar a lo que se instruya en el expediente judicial”, concluye la consejera, a pesar de que el pasado mes de febrero, la propia consejería aseguraba que mantendría vivo el expediente abierto por las presuntas negligencias médicas. Esta confirmación se producía después de que el Juzgado de Instrucción número 6 inciara diligencias para investigar lo sucedido a instancias de una denuncia presentada por los progenitores de los menores.

Los padres aseguran que el médico responsable de controlar la alimentación de los pequeños puso en peligro su salud al modificar los tratamientos de insulina. Juan Antonio Márquez, el médico señalado por los denunciantes, ha negado con rotundidad las imputaciones.

El campamento, celebrado entre el 29 de septiembre y el 2 de octubre, reunió a diez niños con edades comprendidas entre los 7 y los 15 años. De vuelta a casa, según explican los progenitores, los pequeños aseguraron que durante los tres días de campamento habían comido deficientemente y sin control.

El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, subrayaba el pasado mes de febrero que “sólo suspenderá el expediente en marcha en el caso de que la justicia estime incompatibles el procedimiento judicial y la investigación administrativa emprendida por la institución municipal”.

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