riesgo alto de atentado

Interior mantiene la alerta 4 hasta que se reúna la mesa antiterrorista

Los especialistas en terrorismo de la Policía y la Guardia Civil están valorando la situación así como la posibilidad de incrementar el nivel hasta la alerta 5, lo que generaría un estado inédito hasta el momento y conllevaría la salida a la calle del Ejército.

alerta 4
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El Ministerio del Interior ha decidido mantener por el momento la alerta 4 antiterrorista tras los atentados de Barcelona. Este nivel estará vigente al menos hasta que los altos mandos del departamento dirigido por Juan Ignacio Zoido que componen la mesa antiterrorista se reúnan para analizar el nuevo panorama.

Por el momento, los especialistas en terrorismo de la Policía y la Guardia Civil están valorando la situación así como la posibilidad de incrementar el nivel hasta la alerta 5, lo que generaría un estado inédito hasta el momento y conllevaría la salida a la calle del Ejército.

La mesa antiterrorista está compuesta por los altos mandos políticos del Ministerio del Interior así como los máximos expertos de los servicios de información e inteligencia de la Policía Nacional, la Guardia Civil y el Centro Nacional de Inteligencia.

El nivel 4 de alerta antiterrorista, que indica un riesgo alto de ser víctima de un atentado, fue activado el 26 de junio de 2015 por el Ministerio del Interior, justo después de los atentados de Francia, Túnez, Kuwait y Somalia. Desde entonces, la mesa de valoración de la amenaza antiterrorista lo ha ido manteniendo tras cada una de las reuniones que ha organizado periódicamente y también de forma extraordinaria, tras la comisión de nuevos ataques por parte del Daesh o grupos yihadistas.

¿Qué implica la alerta 4?

El Ministerio del Interior tiene divididos en cinco niveles de alerta en su Plan de Prevención y Protección Antiterrorista. El cuarto implica un riesgo de atentado "alto" y se concreta en un catálogo de medidas de seguridad. Básicamente son éstas:

  1. Las Fuerzas de Seguridad del Estado elevan la presión sobre personas sospechosas de terrorismo. En la práctica, conlleva la movilización total de los agentes de la lucha antiterrorista, que extreman las tareas de vigilancia e información sobre personas de riesgo.
  2. Protección de centros sensibles. Incluye los centros estratégicos, como puedan ser centrales nucleares, y centros de transporte, como estaciones de tren o aeropuertos. Estas tareas corresponden al Cuerpo Nacional de Policía y a la Guardia Civil. No obstante, en los últimos meses el Ministerio del Interior ha pedido la colaboración de las compañías de seguridad privadas ante el riesgo de atentados.
  3. Mayor vigilancia callejera. Supone incrementar la presencia de agentes de los dos cuerpos de seguridad en las calles. Implica la movilización de numerosos efectivos, con la consecuente reducción de periodos de libranza y vacacionales.
  4. Advertencia a las Fuerzas Armadas. Aunque las principales tareas corresponden a la Policía y a la Guardia Civil, el Ejército también recibe la comunicación del nivel de alerta para que incremente el nivel de protección sobre sus instalaciones. Además, en el caso de que los agentes de las Fuerzas de Seguridad tuviesen problemas para cubrir todos sus objetivos, los militares tendrían que colaborar en estas tareas.