DETENIDOS TRES HOMBRES Y UNA MUJER

La Policía desarticula una célula yihadista dedicada a captar niños para su integración en las filas del Daesh

Los arrestados, todos ellos de nacionalidad española, buscaban prosélitos cada vez más jóvenes en atención a las directrices marcadas por Daesh para el reclutamiento infantil con el que nutrir sus filas. Las detenciones se han practicado este miércoles en las barriadas de Loma Colmenar, Cortijo Moreno y El Príncipe. 

Agentes de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, en colaboración con la Brigada Provincial de Información de Ceuta, han detenido hoy en las barriadas de El Príncipe, Loma Colmenar y Cortijo Moreno a cuatro personas de nacionalidad española, tres hombres y una mujer, como miembros de una célula terrorista. Los arrestados se dedicaban a la captación y radicalización de jóvenes y niños para su reclutamiento e integración en las filas de la organización terrorista Daesh.

Según informa el Ministerio del Interior, los detenidos participaban de las actividades desarrolladas por la célula desarticulada el pasado 23 de febrero en una operación de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional. Aquella intervención permitió la detención de tres personas, entre las que figuraba Hamed Abderrahaman Ahmed, el ceutí que vivió confinado en la prisión de Guantánamo durante dos años. Todos ellos se encuentran actualmente en prisión provisional.

Los cuatro detenidos hoy miércoles y los tres individuos arrestados en febrero habrían constituido una red de captación y adoctrinamiento salafista que Interior define como “muy activa” y “muy enraizada” en Ceuta. Todos ellos habían constituido un canal de comunicación “constante, fluido y permanente” con combatientes del Daesh en Siria. Desde allí, eran instruidos en los métodos para captar adeptos.

Los terroristas que actuaban como tutores de la célula desde las zonas de conflicto asesoraban a los detenidos sobre rutas de desplazamiento y contactos útiles para alcanzar los territorios controlados por Daesh.

Según Interior, la célula desarticulada hoy había instalado en la ciudad un “entramado reclutador plenamente operativo” que buscaba a prosélitos cada vez más jóvenes. La organización, atendiendo a las directrices de Daesh, había centrado buena parte de sus actividades en el reclutamiento infantil para incrementar el número de adeptos a la causa terrorista.

La captación de niños seguiría el ejemplo de los denominados "cachorros del Califato" (ashbal al-khilafa), menores utilizados como soldado en los territorios ocupados por el Daesh. Los pequeños son sometidos en las zonas de conflicto controladas por los terroristas a procesos de reprogramación de personalidad hasta su utilización como lo que Interior llama “armas humanas”.

 

yihadista detenido cortijo morenoyihadista comisaríaArriba, agentes de la Policía Nacional conducen a uno de los detenidos tras el registro practicado en una vivienda de Cortijo Moreno; abajo, los policías trasladan a otro arrestado desde la Comisaría/ ANTONIO SEMPERE

Estructura

Los integrantes de la célula habían instaurado una organización en la que cada uno de ellos desempeñaba una tarea determinada. La seguridad constituía una de las principales preocupaciones de los detenidos, quienes habían desplegado sofisticadas medidas para no ser detectados en las redes sociales y en sus movimientos a través de blogs de inspiración yihadista. Los detenidos habían llegado a desarrollar un lenguaje convenido para sus comunicaciones y la fijación de puntos de vigilancia en las zonas de reunión. Estas prevenciones habían sido tomadas de los diversos manuales de seguridad que el Daesh distribuye entre sus militantes para evitar la vigilancia de los cuerpos de seguridad.

La utilización de Internet, de las redes sociales y de blog terroristas restringidos constituía una parte importante en la actividad del grupo. Por estos medios, los detenidos justificaban sus actos terroristas y asumían la violencia ejercida como necesaria para lograr la eliminación y la victoria sobre los "infieles" e "impuros".

Además, habían elaborado una adecuada estrategia de restructuración y reasignación de funciones en el caso de que alguno de ellos fuera detectado o detenido, con el objetivo claro de mantener en el tiempo el entramado de captación y reclutamiento terrorista. De hecho, entre los objetivos que animaban a los arrestados, figuraba la exportación a Europa de su modelo de captación y reclutamiento.

Los detenidos tenían como proyecto inmediato la creación de células hermanas en países europeos dedicadas a la captación de jóvenes y niños.

Interior considera que la desarticulación de la célula constituye “la neutralización de una amenaza concreta tanto para la seguridad nacional como para la del resto de los países europeos”. La operación, que continúa abierta, se ha desarrollado bajo la supervisión del Juzgado Central de Instrucción número 5, de la Audiencia Nacional y bajo la coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.

Desde 2015, año en el que el Ministerio del Interior elevó a 4 el nivel de alerta terrorista, las fuerzas y cuerpos de seguridad han detenido a un total de 161 terroristas yihadistas.