Los objetivos principales ha sido ofrecer a las familias tiempo para el respiro, sabiendo que los chicos y chicas están bien atendidos por un monitor particular y una enfermera. Además, les acompañaron también dos profesionales de la Asociación Autismo Ceuta; Noemí Carmona (terapeuta ocupacional) y Elvira Martínez (psicóloga).
También ha servido para reforzar el entrenamiento en las actividades de la vida diaria abordadas en las sesiones de terapia durante el curso, en un entorno real, y sin el apoyo de sus familiares. Conseguir el mayor grado de autonomía personal mediante la asignación de responsabilidades es función de sus capacidades (hacer la cama, establecerse un horario, responsabilizarse de sus pertenencias…). Y por último, proporcionar a las personas con TEA experiencias divertidas, al aire libre en un entorno natural.
Entre las actividades desarrolladas destacan los juegos en grupo, senderismo, deportes en piscina, natación, cine, paint ball, fiesta juvenil y juegos de mesa
Este proyecto, financiado por la Consejería de Sanidad, Asuntos Sociales, Menores e Igualdad y el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, es parte de uno de respiro familiar.
El resultado, un éxito rotundo, Los chicos y chicas felices y superando retos y las familias con las pilas recargadas.
