La explanada de La Marina recupera la normalidad después de siete días de Feria. Las atracciones prácticamente están desmontadas y nada quedan de las tómbolas ni de las casetas.
Los camiones de los feriantes van abandonando poco a poco la ciudad. De esta manera, la Feria se despide hasta el año que viene.
Una Feria que ha sido valorada de manera positiva por la Ciudad, la Delegación del Gobierno y la Policía Local. Una Feria en la que ha reinado la tranquilidad y la seguridad. Los dos únicos incidentes destacables han sido el apuñalamiento a un menor tras una disputa entre migrantes y una intoxicación alimentaria que ha afectado a unas 70 personas y que mantiene ingresadas en el Hospital a once, entre ellos cinco menores con salmonela.
La delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, ha asegurado que ha sido una Feria tranquila y muy segura, con un gran despliegue de las Fuerzas de Seguridad. Por su parte, el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, le ha dao un notable alto a estas Fiestas Patronales. "Ha habido incidente inevitables pero ha sido una Feria digna, la Feria que todos los ceutíes y los que nos visitan se merecen".
Vivas ha calificado la Feria de "confortable, segura, limpia y atractiva".
La Policía Local ha hecho balance de las actuaciones más relevantes y habla de baja conflictividad y gravedad de los hechos.
