Contactamos con esta familia tan viajera mientras disfrutan de sus últimos días en Nueva York, la última ciudad de una aventura que ha llegado a su fin antes de lo esperado después de recorrer más de 50.000 kilómetros que les han llevado a recorrer España, Francia, Inglaterra, Escocia, Bélgica, Países Bajos, Alemania, Polonia, República Checa, Hungría, Eslovaquia, Eslovenia, Italia, Austria, Rumanía, Serbia, Macedonia, Grecia, Turquía, Irán, Emiratos, Omán, EEUU y Canadá. En sus planes iniciales estaba recorrer el continente americano de norte a sur pero han decidido volver a casa. Lo anunciaron en un video en directo a través de las redes sociales, medio por el que hemos seguido su aventura desde que salieron de Ceuta hace 16 meses con sus hijas, su perra y una caravana llena de sueños por cumplir y aventuras por vivir.
Pregunta: ¿Por qué habéis decidido volver antes de lo previsto?
Respuesta: (Paloma y Lolo sonríen con un toque de tristeza en sus miradas) Ha sido una decisión muy difícil y meditada. Son muchas cosas las que sientes y te planteas cuando llevas esta forma de vida. Hay momentos duros y momentos maravillosos, conoces a gente increíble, pero a la vez echas de menos a tu gente de siempre… Sabemos que hemos conocido el significado de la palabra libertad y que ahora que la hemos vivido no queremos perderla, así que hemos decidido volver para recargar pilas.
En los últimos meses han pasado muchas cosas ajenas a nosotros que nos han afectado… estuvimos dos meses sin nuestra casa en un país que no es fácil, durante esos casi 60 días vivimos en un rancho, trabajando a cambio de alojamiento y comida, luego cuando fuimos a por nuestra autocaravana el barco no llegaba… y tuvimos que estar 15 días tirados en un hotel de carretera sin coche de alquiler, hemos tenido varios accidentes con Emma, que siempre se han quedado en sustos, pero que suman, echamos de menos a la familia, sobre todo las niñas a sus primas, preguntan por ellas varias veces al día y esto nos afecta, porque nosotros no viajamos solos, somos 4 y los 4 tenemos que estar a una, si uno de nosotros cae, caemos todos… Ellas son felices y de hecho les preguntamos si quieren que acabe el viaje y siempre nos dicen que no, pero que quieren ver a sus primas, también operan a la madre de Paloma por segunda vez durante este tiempo y en la primera operación no estuvimos porque sólo llevábamos un par de meses en ruta, hemos sido titos de nuevo, y bueno, tampoco somos ricos y EEUU es un país muy caro y difícil para viajar de la forma en que nosotros lo hacemos, sentimos que estamos en el país equivocado en el momento equivocado y nuestros ahorros empiezan a estar tocados y viajando con niñas no puedes asumir riesgos que asumirías sin ellas.
Creemos que es el momento de tomarnos unas vacaciones, recargar pilas con la familia, durante los casi 16 meses de viaje que llevamos no hemos vuelto a casa, nos hemos perdido cumpleaños, celebraciones familiares y también duelos. Necesitamos darle un abrazo bien grande a nuestra familia y descansar un poco. Vivir de esta forma es lo mejor que nos ha pasado pero también lo más cansado. Llevamos 16 meses sin salir a cenar o a comer solos, y aunque lo mejor que nos ha dado este viaje es el tiempo que hemos pasado con nuestras hijas, de vez en cuando, un respiro no viene mal.
P: ¿Es un adiós o un hasta luego a Vaya viaje?
R: Sabemos que es un hasta luego. Nos hemos convertido en nómadas. Hemos sido capaces de vivir con lo justo y no necesitar nada más que conocer otras culturas, lugares increíbles y a gente extraordinaria. Conducir por las ciudades y llegar a ellas por tierra da una perspectiva que otra persona que llega en avión no tiene, y esto nos encanta. La libertad engancha. Dejar atrás los perjuicios, aprender, probar, oler… nos volvemos a casa con muchos proyectos que queremos desarrollar a corto plazo, y por supuesto seguir siendo nómadas es uno de ellos.
Necesitamos darle un abrazo bien grande a nuestra familia y descansar un poco. Vivir de esta forma es lo mejor que nos ha pasado pero también lo más cansado
P: ¿Cómo habéis organizado la vuelta?
R: Aun no sabemos cuándo volvemos porque no tenemos el billete. Estamos esperando a saber la fecha de embarque de la autocaravana en un RoRo. Sabemos que salimos desde Nueva York hacia Madrid y luego a Ceuta, y sabemos que la autocaravana va desde Nueva York a Santander, y que tendremos que ir a buscarla, y aprovecharemos para hacer una ruta por el norte de España. Queremos irnos a Asturias y Galicia unos días. Creemos que saldremos el 25 o 26 de septiembre, pero estamos esperando la fecha exacta para comprar los billetes.
P: ¿Qué es lo primero que vais a hacer cuando piséis suelo caballa?
R: Lo primero, descansar, abrazar mucho a la familia e ir al cine, y lo segundo, desarrollar nuestros nuevos proyectos. Tenemos muchos y creemos que van a gustar, hay algunos personales y otros para viajeros. Tenemos que poner al día la web y publicar muchas cosas que quedaron en el tintero, localizaciones, mapas, consejos, y artículos sobre países como Irán y Turquía.
P: ¿Os acostumbraréis a vivir sobre tierra y no sobre ruedas? Vuestra casa os va a parecer enorme al lado de la caravana.
R: (Risas) Pues la verdad es que nuestra casa está alquilada hasta febrero, así que nos vamos a ir a vivir a casa de los padres de Paloma de nuevo (risas). Así que aunque la casa es grande, vamos a vivir en comuna, algo que probamos en Emiratos y Omán y nos encantó. Pero si, nos va a parecer inmenso, sobre todo el baño y la cocina. (Risas).
P: ¿Cómo han recibido las niñas la noticia de que vuelven a casa?
R: Saben que algo pasa y que hablamos de volver, pero no les hemos dicho exactamente cuándo porque queremos darles una sorpresa y que vean a sus primas en el Puerto. Estamos deseando ver qué cara se les queda (risas).
P: Cuando se cierra una etapa llega el tiempo de los balances. ¿Cuál es el que hacéis de esta aventura?
R: Un balance más que positivo. Volvemos siendo un poco más viejos y mucho más sabios. Hemos aprendido muchísimo no sólo de geografía, si no de supervivencia, de amor, de compañerismo, de generosidad, hemos aprendido a valorar lo realmente importante y a que no es necesario gastar en cosas materiales para ser felices, hemos aprendido a tomar decisiones, a gestionar situaciones límite, a relativizar los problemas que antes nos parecían importantes, hemos aprendido tanto que este viaje nos ha cambiado la vida y nos ha dado herramientas que nos duraran para siempre.
P: ¿Lo recomendaríais?
R: Por supuesto. Recomendamos que la gente busque el camino para cumplir sus sueños, sean los que sean. El nuestro es vivir una vida nómada, y ya hemos conseguido el primer paso.
P: ¿Qué consejos daríais a quien quiera viajar como vosotros y con niños y que nadie os dijo cuándo empezasteis esta aventura?
R: (Risas) Cada viaje es diferente, cada familia es diferente y lo que es bueno para nosotros no tiene por qué serlo para lo demás, pero nuestro primer consejo sería que sean felices, que se relajen y disfruten de cada experiencia, buena o mala, que les dé el viaje. Les diríamos que no hagan caso a las noticias, que la gente en el mundo es buena y generosa. Les diríamos que todos los planes que han hecho no sirven para nada, porque el viaje marca la ruta, el viaje se hace a sí mismo y hay que estar dispuestos a ceder, a cambiar, a perderse cosas por encontrar otras nuevas.
A los que viajan con niños y niñas, les diríamos que aprendan a calmarse, que se llenen de paciencia, que lleven muchas libretas, colores y un mapamundi, también películas sobre los lugares que vayan a conocer porque ayuda a que les interese el viaje… y sobre todo, que el ritmo lo marcan ellos. Habrá cosas que no visitarás y que no verás… pero no importa, porque el viaje lo es todo, no los monumentos o museos a los que entras. El viaje es verlas correr detrás de ardillas o rescatar estrellas de mar, el viaje son las siestas y los días de descanso, son los crepes o las palomitas que se hacen para merendar… El viaje es el tiempo que nos estamos regalando juntos y que ya nadie ni nada nos podrán robar.
P: Uno de los proyectos que teníais en ruta era el programa Ceutíes por el mundo, del que la televisión pública ya emitió una primera temporada. ¿Cómo ha quedado el asunto?
R: Ese es otro tema. Teníamos contratada la segunda temporada a falta de convocarse un Consejo de Administración y de hecho llevamos grabando programas desde que llegamos a Emiratos en enero de este año, pero no sabemos por qué esta reunión no se ha producido y nosotros, sintiéndolo mucho hemos dejado de grabar más programas. Tenemos 10 ceutíes entrevistados y esperamos que la Televisión quiera emitirlos, si no, lo haremos nosotros en nuestro Facebook y canal de YouTube.
Todos nuestros proyectos para este viaje quedan en pausa, hasta que volvamos a viajar, tenemos que ir a India porque nuestra escuela está medio construida y queremos volver a Grecia, esta vez a Lesbos, pero sin niñas para servir de ayuda de verdad. Queremos entrevistar a más mujeres con otros perfiles, porque ha sido muy enriquecedor y queremos darle muchos besos a todos los ceutíes a los que no hemos podido llegar en esta ocasión. Cada uno de estos proyectos nos ha aportado cosas increíbles. Hemos conocido a gente maravillosa y siempre formarán parte de nuestra vida.
