Marsave, la empresa adjudicataria del Servicio de Socorrismo, se despide por esta temporada de las diferentes playas de la ciudad. Desde este lunes, las playas no dispondrán de socorristas.
Desde el 15 de junio, los socorristas han realizado más de 1.000 asistencias. Las más numerosas han sido por heridas y cortes, seguida de golpes, picadura de medusas y quemaduras. En menor medida, Marsave ha tenido que hacer frente a esguinces, golpes de calor, intoxicaciones etílicas e incluso el extravío de un menor.
Durante todo el verano, Marsave ha realizado 18 rescates acuáticos y 20 evacuaciones al Hospital Universitario. Afortunadamente, no hay que lamentar ningún fallecimiento por ahogamiento.
En general, la empresa realiza un balance positivo de esta temporada, que a diferencia de la anterior no se ha caracterizado por la llegada de migrantes a bordo de motos de agua. El verano pasado, los socorristas tuvieron que atender a decenas de migrantes que eran abandonados en la orilla de las playas.
