La mañana de este martes se presentaba con contratiempos en la sala de vistas del Juzgado de lo Penal número 2. En efecto, una avería en un transformador impedía la normal celebración de vistas en la sala, ya que no había suministro eléctrico.
No funcionaban los micrófonos, vitales para la grabación de todo lo que se hablara en sala, así como también se presentaban algunos problemas en cuanto al establecimiento de videoconferencias y también disfunciones en el sistema informático.
Sin embargo, a pesar de que todo hacía apuntar a que el problema iba a generar suspensiones de las vistas, lo cierto es que unos técnicos especializados abordaron con determinación la avería y lograron lo que parecía impensable: que todo volviera a funcionar. Se ha puesto de relieve la profesionalidad, la celeridad en la resolución del problema eléctrico y la alta capacitación de las personas que se encargaron de solventar el problema, que no era, ni mucho menos, menor.
En todo caso, e independientemente de la resolución en tiempo récord, a contrarreloj, vuelve a ponerse de manifiesto el hecho de que las instalaciones del Edificio Ceuta Center, en cuya segunda planta se encuentra dependencias judiciales, tales como la Audiencia Provincial o los juzgados de lo Penal, dejan mucho que desear, de manera que según las fuentes judiciales consultadas por Ceuta Actualidad volvieron a mostrar su descontento con las circunstancias en las que han de desarrollar su trabajo.
Una vez que fueron verificados, uno a uno, los dispositivos esenciales para la celebración de vistas orales, se iniciaron las actuaciones judiciales, con cierto retraso, pero ciertamente mínimo gracias a la actuación de los técnicos de mantenimiento.
Por otra parte, y como cabía esperar, no funcionaba, una vez más, el único ascensor, se supone que operativo, de los existentes en el Edificio. Personas con problemas de movilidad se vieron impedidas de ser atendidas en distintas dependencias, habida cuenta de que no podían ascender por las escaleras.
