En su dura nota, los localistas afirman que después de transcurridos dos días de un episodio de violencia extrema sufrido por un ciudadano inocente, cuyo única culpabilidad ha sido intentar mediar en un conflicto, y que ha sacudido a la opinión pública, aún no existe una versión oficial de los hechos, ni una asunción de responsabilidades por el modo tan nefasto en que se ha gestionado.
Así desde Caballas se dice que no se puede entender, ni aceptar, que los autores del tiroteo huyeran con absoluta tranquilidad ante la pasividad de la dotación policial de la Jefatura situada a penas cincuenta metros del lugar de los hechos. Al igual que habiéndose notificado el altercado que dio origen al tiroteo a través de 112, no se personase la Policía para evitar lo que fatalmente sucedió después.
Para la formación tampoco es admisible que aún no se hayan esclarecidos los hechos a pesar de que fueron múltiples los testigos que lo presenciaron, así que la Delegación del Gobierno haya comparecido ante la opinión pública para explicar con detalle todo lo acontecido.
Caballas exige al delegado del Gobierno una comparecencia inmediata para informar a la ciudadanía sobre los hechos y las investigaciones que se están llevando a cabo para detener a los autores de los disparos.