Carreira aseguró “que no soy responsable de la gestión de esa encomienda”. “Esa encomienda se firmó en julio, y si ustedes recuerdan, terminado julio yo pasé a Turismo y Deportes, por lo tanto no sé ni para que me han llamado”.
Prosiguiendo con sus afirmaciones, el consejero ha precisado que la denuncia “es política” y cuyo objetivo que se persigue es que “la Administración de Justicia paralice la acción del Gobierno”. “Ya que no lo consiguen a través de las urnas, el gran Juan Luis Arostégui ha pretendido enmierdar a la justicia” en algo en lo que este estamento “no tiene por qué intervenir”.
Carreira ha patentizado que “voy a seguir defendiendo los intereses generales de la ciudad y jamás me someteré a chantajes ni a presiones de nadie”.
El consejero asegura que tiene la conciencia “tranquila porque he hecho las cosas bien, ajustadas a derecho, y en interés de la mejora de los servicios de Ceuta”.
Por último ha negado con rotundidad que Tragsa haya hecho servicios que estaban encomendados a Trace, ya que la encomienda es muy clara, “lo que pasa que ni los denunciantes se la han leído”.
La denuncia señala al presidente de la Ciudad, Juan Vivas, y a su consejero Emilio Carreira como los responsables de las presuntas irregularidades cometidas en la contratación de la sociedad estatal Tragsa de un servicio público de limpieza. La acción judicial sitúa a Al Lal en una difícil posición, toda vez que la presidenta de CSIF es, a la sazón, vicesecretaria general del PP ceutí.