Agentes de la Policía Nacional han detenido a un joven que había realizado una denuncia falsa, según todos los indicios que barajan los agentes. Se presenta el día 8 en la Jefatura Superior para denunciar que había sido víctima de un robo a mano armada. Según dice, dos encapuchados, armados con una pistola, le asaltan en el barrio del Príncipe, cuando circulaba con su vehículo.
Explica que le roban un móvil de última generación, un iPhone 6 Plus, valorado en 600 euros. En su denuncia hace hincapié en el hecho de que los asaltantes cubrían sus rostros y que además llevaban guantes, para no ser identificados.
Los policías sospechaban que el joven denunciante podría estar simulando haber sido víctima de un delito, con fines lucrativos. Se le cita de nuevo y se le toma una nueva declaración detallada de todos los movimientos que había realizado ese día. Los agentes ya tenían conocimiento que la versión de los hechos aportada por el denunciante no podía ser cierta.
El denunciante se persona más tarde en la Jefatura para retirar la denuncia y reconoce que había comprado a plazo el teléfono y que lo había vendido en una tienda en Castillejos (Marruecos) por 400 euros que gastó en ropa. Trataba de reclamar a la compañía el importe del teléfono o bien solicitar otro y aportaba la denuncia para que le fuera repuesto mediante el seguro de robo.
Finalmente, fue puesto en libertad con cargos.
