Detenido un piloto de motos de agua que cruzaba a migrantes por el Estrecho

Las víctimas podían llegar a pagar hasta 10.000 euros a cambio de llegar a Europa 

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photo_camera El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número tres de Algeciras (Policía Nacional)

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Algeciras a un hombre de 31 años como presunto autor de un delito de tráfico ilegal de migrantes y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. El arrestado, miembro de una organización criminal, intentó introducir de manera ilegal en territorio español a un menor de edad desde las costas marroquíes en una moto de agua.

La investigación se inició cuando los agentes detectaron a dos personas que iban a bordo de una moto de agua que quedó a la deriva en mitad del Estrecho tras haberse quedado sin combustible. Tanto el piloto como el menor permanecieron unas 12 horas a la deriva, desde el mediodía hasta bien entrada la noche, soportando las inclemencias del tiempo. Trataron de pedir ayuda a otros miembros de la organización pero no recibiendo ningún tipo de auxilio. 

El piloto detenido cuenta en su haber con un amplio historial delictivo. Anteriormente fue detenido por los delitos de terrorismo y contra la seguridad nacional, por los que fue a prisión. Tras su detención, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número tres de Algeciras, que estaba en funciones de guardia, el cual decretó su ingreso en prisión.

En las últimas semanas han proliferado la pases utilizando el método de las motos de agua para hacer llegar a la península personas procedentes de Marruecos. Las motos de agua son  utilizadas  por las organizaciones criminales dedicadas al tráfico de personas, como un medio rápido y seguro para conseguir sus fines delictivos. Tanto es así que llegan a cobrar por pasaje hasta 10.000 euros.

Esta actuación se enmarca dentro del dispositivo específico creado por la Brigada Local de Extranjería y Fronteras de la Comisaría Local de Algeciras contra las redes de inmigración clandestina, ante el incremento de la llegada de embarcaciones y motos de agua en las últimas semanas, ha concluido la Dirección General de la Policía.