El Juzgado de lo Penal número 2 ha absuelto de un delito de desobediencia grave a la joven Fadua H.M., acusada de incumplir el confinamiento domiciliario tras dar positivo en una prueba de coronavirus. “No ha resultado acreditado que dicha acusada hubiese contravenido en modo alguno la medida preventiva de aislamiento domiciliario acordada por Resolución administrativa del Servicio de Epidemiología de la Consejería de Sanidad, Consumo y Gobernación de la Ciudad Autónoma de Ceuta, que le fue notificada el 19 de marzo de 2020 a través de correo electrónico y sin que se le efectuaran apercibimientos legales en caso de incumplimiento”, sostiene la juez.
La sentencia considera que los hechos que se imputan a la acusada no han quedado acreditados.
La joven había llegado procedente de Londres a mediados de marzo. Tras ponerse en contacto con las autoridades sanitarias para anunciar que acababa de llegar del extranjero, le fue recomendado que se mantuviera aislada en su domicilio. Finalmente, la prueba PCR que le fue practicada para determinar si estaba contagiada dio positivo.
La juez considera “aislada, inconcreta y plagada de lagunas” el testimonio de la funcionaria del Servicio de Epidemiología de la Consejería de Sanidad, que aseguró que la acusada había llamado al teléfono de atención por el coronavirus para advertir que tomaría un taxi “para contagiar a todo el mundo”.
La acusada ha estado representada por el abogado Néstor García, de Tingitana Consultores.
