Parece paradójico pero la sentencia del Tribunal Supremo contra el nombramiento de miembros del Gobierno “no electos” se ha aplicado antes en Melilla que en Ceuta. La ha aplicado antes un gobierno tricolor (CS-CpM-PSOE) que el Partido Popular.
El asunto apesta a nepotismo por el pariente que el presidente de Ceuta mantiene empleado y también por los amigos a los que no quiere dejar sin un día de salario.
Los informes jurídicos, a los que aludió el portavoz del Gobierno ceutí, también los solicitó el presidente de la Ciudad de Melilla, Eduardo de Castro (Cs), que ya tomó la decisión. Ayer aparecía en el Boletín Oficial de la Ciudad de Melilla (BOME) los ceses de los tres consejeros y tres viceconsejeros “no electos” nombrados durante su mandato.
Se espera que el portavoz del Consejo de Gobierno aclare hoy cómo queda el asunto y cuál será el destino de los todavía viceconsejeros.